Canarias ha registrado 135.392 empresas creadas entre 1994 y 2024, según el informe Demografía empresarial 1994-2024 elaborado por Informa D&B. El archipiélago representa el 4,13 % del total nacional, con un tejido empresarial que ha seguido la misma evolución que el conjunto del país: fuerte expansión hasta 2007, caída durante la crisis financiera y un nuevo repunte tras la pandemia.
España cerró 2024 con 119.801 nuevas sociedades, la cifra más alta desde 2008. El crecimiento respecto a 2023 fue del 9,7 %, confirmando la recuperación del emprendimiento tras el frenazo del Covid-19. En Canarias, los registros mercantiles también muestran una tendencia positiva, impulsada por el turismo y los servicios tecnológicos.
A lo largo de los últimos treinta años se constituyeron 3,27 millones de empresas en España. El capital invertido en 2024 alcanzó 5.925 millones de euros, con una media de 50.000 euros por sociedad, aunque el informe advierte de una progresiva reducción de la inversión inicial desde 2016.
Supervivencia empresarial
Solo el 17,6 % de las empresas fundadas en 1994 siguen activas. El porcentaje sube al 19,5 % en las creadas en 2004 y al 35,8 % en las constituidas en 2014. La mayoría de los cierres son oficiales (disoluciones o extinciones registrales) y apenas un 0,26 % de las empresas creadas en 2024 entraron en concurso de acreedores.
La Comunidad de Madrid concentra el 20,35 % de las sociedades creadas entre 1994 y 2024, seguida de Cataluña (19,05 %) y Andalucía (16 %). Canarias ocupa la novena posición, ligeramente por encima de Baleares, reflejando su peso económico medio dentro del conjunto autonómico.
Contexto canario
El informe destaca que las empresas isleñas están especialmente vinculadas al turismo, la construcción y el comercio, sectores que marcaron las fases de auge y recesión. Tras la crisis sanitaria, la digitalización y el auge del emprendimiento joven han sido claves en la reactivación. Sin embargo, la elevada mortalidad empresarial —más del 60 % de las sociedades desaparecen antes de diez años— sigue siendo uno de los retos para consolidar el tejido productivo canario.