Dos buques de lujo especializados en los cruceros boutique, el 'Ocean Victory' y el 'Ocean Albatros', han arribado al Puerto de Las Palmas esta semana, dejando imágenes impresionantes en la bahía capitalina, como la captaba por el fotógrafo Nicolás Arocha durante la entrada a puerto del 'Albatros'.
Ambos cruceros son 'hermanos gemelos', están construidos en el astillero chino CMHI Haimen y rondan los dos años de navegación.
Sabor español
El 'Victory' pertenece a Alma Cruceros, que es la primera naviera española especializada en estos buques exclusivos, más volcados en ofrecer experiencias de autor a sus clientes, como acredita las 15 Estrellas Michelín de este buque, con seis restaurantes y las recetas de Martín Berasategui como principal reclama a bordo.
El barco zarpó este sábado desde Las Palmas de Gran Canaria en su viaje inaugural, rumbo a Fuerteventura, para luego emprender un tour por varios puertos africanos y regresar a Málaga, que es donde Alma Cruceros tiene su sede.
Canarias, el Mediterráneo y Andalucía están en la órbita de esta nueva naviera española, que ha apostado por el Puerto de Las Palmas en su viaje inaugural, como acredita la escala este fin de semana, en la que la Autoridad Portuaria de Las Palmas (APLP) entregó al capitán la tradicional metopa al ser su primera visita.
Expedición
El 'Albatros', sin embargo, arribó el lunes y está especializado en expediciones polares. Vino de Montevideo, en Latino América, tras terminar su temporada en La Antártida. Ahora, tras recalar en Casablanca, viaja en dirección a Portugal, pues en verano suele ofrecer excursiones a Svalbard, Islandia y Groenlandia, en El Ártico.
Posee 94 camarotes y suites, todos con vistas panorámicas al mar y la mayoría con balcón propio, con capacidad para unos 180 viajeros. Entre los equipos a bordo destaca su sauna panorámica, un servicio que no tiene su hermano gemelo, más enfocado a la alta cocina gracias a sus seis restaurantes y sus recetas de Estrellas Michelín, aunque en su etapa anterior también se dedicó a la exploración en los polos.
En su ADN comparten elementos como la proa invertida, que les proporciona una gran estabilidad en la navegación. Ambos forman parte de una nueva generación de buques de bajo consumo energético, con 4 motores diésel y 2 motores eléctricos, todos controlados electrónicamente para optimizar la velocidad y el consumo de combustible, explica la compañía en su web.
