Canarias ha dejado atrás la categoría de “región emergente en innovación” y ha pasado a ser considerada “innovadora moderada” por la Comisión Europea, según el Regional Innovation Scoreboard 2025, el principal informe comunitario que mide el rendimiento innovador de las regiones europeas.

El salto supone un avance relevante en términos estadísticos: el Archipiélago mejora 17,7 puntos porcentuales desde 2018, uno de los mayores incrementos registrados en España en los últimos siete años. Bruselas cita expresamente a Canarias como uno de los territorios que más ha contribuido a reducir la brecha regional en innovación dentro del Estado.

Sin embargo, el cambio de categoría no oculta una realidad menos favorable. Canarias sigue muy por debajo de la media española y europea. En 2025, el índice de innovación canario se sitúa en 70,8 puntos, frente a los 92,7 de la media nacional, lo que coloca a las Islas en el puesto 184 del ranking europeo de regiones.

Un avance acelerado

El informe subraya que la mejora canaria se produce tras años de bajo rendimiento y en un contexto de fuerte desigualdad territorial en España. Mientras regiones como Cataluña, Madrid o País Vasco superan ya la media europea, Canarias continúa en la franja baja, aunque con una evolución más dinámica que la de otros territorios del sur.

Desde Bruselas se apunta a que este crecimiento responde, en parte, a una diversificación progresiva de una economía históricamente centrada en los servicios, así como al impulso de políticas públicas de investigación, digitalización y transferencia de conocimiento. El periodo 2023–2025 muestra además una aceleración del avance, coincidiendo con la llegada masiva de fondos europeos.

Más startups y dinamismo

En esta línea, Ana Torrent, gerente del Clúster Canarias Excelencia Tecnológica, reconoce que el esfuerzo institucional empieza a reflejarse en este tipo de informes. “Desde el Gobierno de Canarias y otras instituciones se ha hecho un esfuerzo elevado para que las empresas puedan innovar, creando instrumentos que facilitan que esa innovación llegue realmente al tejido empresarial”, señala.

Torrent apunta también a un mayor dinamismo del ecosistema emprendedor, especialmente en los últimos años. “Estamos en un momento de auge de startups en Canarias. El ecosistema es más visible y se le está dando más importancia a las industrias y tecnologías emergentes. Todo ese esfuerzo se ve reflejado en informes como este, con más inversión y más proyectos innovadores”.

Todavía con debilidades

Pese al reconocimiento europeo, el propio informe advierte que mejorar en los indicadores no equivale automáticamente a transformar el modelo productivo. Canarias continúa mostrando debilidades estructurales en ámbitos clave como la innovación empresarial, la generación de patentes o la capacidad de las pymes para escalar proyectos tecnológicos.

La Comisión Europea sitúa así al Archipiélago en una posición intermedia: ya no es una región rezagada en términos absolutos, pero tampoco una que compita de tú a tú con los polos innovadores del país o del continente.

Un doble esfuerzo para las Islas

La gerente del clúster advierte que innovar en Canarias sigue siendo más complejo que en otras regiones. “Aunque desde las asociaciones y los clústeres estamos logrando proyectos a nivel nacional y europeo que posicionan a nuestras empresas, no se puede obviar que somos una región ultraperiférica, con las dificultades propias de la insularidad y la distancia”, subraya.

Entre los principales obstáculos, Torrent cita el sobrecoste logístico y de visibilidad. “Tenemos que hacer un doble esfuerzo para darnos a conocer. Aunque contamos con buenas conexiones internacionales, innovar implica asumir más costes, y cuando una empresa empieza, cualquier coste influye”, explica. A ello se suma la fragmentación interna del Archipiélago: “A veces ni siquiera sabemos qué se está haciendo en la isla de enfrente”.

La dependencia histórica del turismo es otro de los factores que ralentizan el cambio de modelo. “Nuestro principal sustento económico sigue siendo el turismo, y cambiar esa visión hacia una diversificación basada en la innovación no es sencillo. Sin embargo, el turismo inteligente es en sí mismo una industria emergente y una oportunidad clara para diferenciarnos”, apunta.

Retener el talento canario

Uno de los elementos donde Torrent sí detecta un giro claro es en el mercado laboral tecnológico. “Durante años existió la idea de que para triunfar en el sector tecnológico había que salir de Canarias. Eso ya no es así. Los salarios están bastante equiparados al resto de España y hay una enorme demanda de talento. Ahora mismo hay más proyectos que profesionales disponibles”.

El reto, añade, pasa por fomentar vocaciones STEM, captar talento y retenerlo en las Islas, además de reducir trabas administrativas. “La burocracia sigue siendo un freno, no solo en Canarias, sino a nivel nacional. Facilitar procesos como la compra pública innovadora o los proyectos piloto ayudaría mucho a que las empresas puedan testear e innovar sin tantos obstáculos”.

Apostar por la innovación y el cambio

Para la gerente del clúster, el mensaje del informe europeo es claro, pero exige continuidad. “Necesitamos que las instituciones sigan apostando de forma clara por la innovación y que se alineen con el ecosistema. Desde los clústeres y asociaciones actuamos como intermediarios para que ese apoyo llegue a las empresas, pero hace falta una apuesta sostenida, pública y privada, para consolidar este crecimiento”.

El Regional Innovation Scoreboard 2025 confirma así que Canarias avanza, pero también deja claro que el desafío no es solo mejorar en los rankings europeos, sino seguir convirtiendo ese progreso en un cambio estructural del modelo económico, capaz de generar empleo cualificado, valor añadido y mayor resiliencia para el Archipiélago.