La Gomera, el ejemplo de la dependencia energética de Canarias: Endesa y los combustibles fósiles

Pese a los esfuerzos por cambiar la tendencia, aun hoy el 80% de la energía en Canarias se produce en centrales térmicas | La isla colombina ya genera con renovables más de lo que gasta

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Uno de los 14 grupos electrógenos desplazados hasta La Gomera para recuperar el suministro eléctrico./ EFE - RAMÓN DE LA ROCHA
Uno de los 14 grupos electrógenos desplazados hasta La Gomera para recuperar el suministro eléctrico./ EFE - RAMÓN DE LA ROCHA

Hace poco más de un año se produjo un “hito” en La Gomera, en palabras del presidente del cabildo insular Casimiro Curbelo. Asistía el mandatario al comienzo de los trabajos de instalación de cinco parques eólicos en San Sebastian, capital de la isla, cuya inauguración se produjo el pasado marzo.

La suma de ellas genera una potencia total de 12 megavatios -11,75 MW, para ser exactos según datos de mayo-, la cual está llamada a abastecer a la isla con energía cien por cien renovable, e incluso a exportar dicha energía. Este sábado, a pocas horas de que se produjese el apagón, o el eufemismo del cero energético si lo prefiere, la demanda máxima alcanzó los 10,4 MW, un guarismo que se mueve entre máximos.

A las 3.00 horas de la madrugada un incendio en la central térmica de El Palmar condujo a la paralización del suministro eléctrico en la isla. Otro hito, puesto que se trata de la primera vez que sucede.

A la pregunta de por qué esta incongruencia hallamos la respuesta en la falta de una subestación, que será necesaria para conectar próximamente La Gomera con Tenerife -lo cual evitará estas incidencias- y que en la actualidad no permite una mayor implantación de las renovables en el territorio, la menor del Archipiélago.

Dependencia fósil

La Gomera es la isla que menos apostó en un principio por las energías limpias, una rémora que aun le hace estar a la cola en Canarias.

En los últimos años se ha intentado revertir esa tendencia, necesidad más que evidente visto lo sucedido tras la madrugada del sábado al domingo. Este año ha registrado un relevante aumento de su potencia renovable, al pasar de 1,4 MW de potencia a 15,73 MW, gracias a los cinco parques eólicos antes mencionados, instalados por la gallega Ecoener.

Lo cierto es que la dependencia de La Gomera de los combustibles fósiles es extrapolable al resto del Archipiélago, estando a la cola nacional con poco más de un 20% de renovables (Castilla y León produce un 89%). El lado positivo es que hace una década el dato era de un 7%, por lo que se puede hablar de un aumento considerable.

Es reseñable que la generación de energía térmica en Canarias llega a cuadriplicar su precio en comparación con la Península, mientras que este coste se reduce a la mitad si hablamos de energías renovables, menos incluso si se incluyen subvenciones.

Dependencia de Endesa

A la dependencia de combustibles fósiles habría que añadir una más, la que el Archipiélago tiene de Endesa, que ejerce de facto un monopolio que le permite tomarse ciertas licencias, tales como pagar decenas de millones de euros en la última década en forma de multas por los sucesivos apagones en Tenerife, La Gomera, La Palma y El Hierro. Cuatro de cuatro.

Incendios, desconexiones fortuitas o infraestructuras “ajenas a la compañía” que el Gobierno de Canarias ha considerado a lo largo de los años “infracciones tipificadas como muy graves en la Ley del Sector Eléctrico” y que, sin embargo, no dejan de sucederse mientras numerosos actores políticos y de la sociedad civil denuncian una falta de inversiones necesarias para evitar estas situaciones.

El problema viene de antiguo. Ya en 2005, cuando la tormenta tropical Delta trajo consigo un escenario nunca antes visto en el Archipiélago, especialmente en Tenerife, el ejecutivo regional encargo un informe técnico a la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria que señalaba a Unelco-Endesa, aunque sin dejar de mencionar al los gobiernos autonómico y central.

La subestación como solución

Dada la sobrada capacidad de los cinco nuevos parques eólicos instalados por Ecoener en La Gomera, surge la duda razonable de si no hubiera podido ayudar su generación eléctrica a solventar antes el apagón.

Para ello hubiese sido necesaria la existencia de una subestación en la central de El Palmar, proyectada pero aun no construida dentro del proyecto del cable submarino que unirá la isla con Tenerife y que aporta un sistema capaz de integrar en condiciones de seguridad y calidad de suministro la energía renovable.

Hay que tener en cuenta que en La Gomera y El Hierro sólo existen motores diésel, empleando turbinas de gas como sistemas para la gestión en punta. Se opta por este tipo de generadores, que en este caso no están operando con su combustible de diseño -y además son más baratos-, porque tienen unos tiempos de respuesta adecuados para la gestión a tiempo real de los sistemas eléctricos ante condiciones variables.  

Pero aquí viene la diferencia. Mientras que estos motores diésel sirven de apoyo a la Central Hidroeólica de Gorona del Viento de El Hierro -que aporta casi el 100% de la energía-, en la isla colombina no es así, aunque se espera que su funcionamiento sea semejante cuando se finalice la interconexión eléctrica con Tenerife.

Sistema aislado

Un sistema aislado que, hasta que culminen las obras de cableado en dos años, no ha podido afrontar una caída del sistema que ha dejado inoperativos gran parte de los grupos electrógenos de la Isla, lo que ha llevado al desplazamiento de catorce provenientes de distintos puntos para restablecer el servicio.

Una problemática que se prevé que sea solucionada una vez se conecten La Gomera y Tenerife, ya que proporcionará una red eléctrica de transporte (instalaciones con tensión igual o superior a 66 kV) para evitar estas incidencias años después de su planeamiento inicial, hace casi una década.