Canarias bajará impuestos en los próximos presupuestos. Los mensajes que lanzan desde hace días el presidente, Ángel Víctor Torres, y su vicepresidente y consejero de Hacienda, Román Rodríguez, apuntan a eso. Pero cuáles y cuánto está por ver. Y si será solo a través de ayudas y deducciones o habrá también una deflactación del IRPF, una medida que el Gobierno central lleva meses rechazando.
"Lo lógico es que las comunidades autónomas tengamos en cuenta qué es lo que hace el Gobierno de España para complementar en nuestro ámbito esas propuestas. Lo hemos hecho en todos los ámbitos y lo haremos también en el fiscal", declaró Torres este miércoles. Si cumple con eso, de los presupuestos canarios quizá habría que esperar una subida aún mayor de los impuestos las rentas altas, que es lo anunciado por el Ministerio de Hacienda. Pero tanto Torres como Rodríguez ya han anunciado que el plan del Ejecutivo de coalición apunta a deducciones y bonificaciones puntuales dirigidas a los sectores vulnerables, como las vigentes en la actualidad.
Lo que no parece probable es una rebaja importante del IRPF. "Somos contrarios a una rebaja lineal de los tipos del IGIC y a una rebaja general del tramo autonómico del IRPF, que no discrimina entre quienes más o menos pueden aportar por sus niveles de ingresos", escribió hace unos días Rodríguez en su blog.
La rebaja de Puig
El Gobierno canario busca un doble equilibrio: el interno entre sus dos principales socios en lo económico (PSOE y Nueva Canarias) y externo con Madrid. Moncloa no tiene previsto tocar el IRPF para rentas bajas, sí para las altas. Pero la batalla fiscal entre comunidades, incluidas las que gobierna el PSOE, como la Comunidad Valenciana, puede forzar un cambio de postura.
En medio del enfrentamiento con las comunidades del Partido Popular (PP), donde las posiciones estaban bastante definidas, Ximo Puig, uno de los barones socialistas que más ha apoyado a Pedro Sánchez, se desmarcó con esa rebaja del IRPF para las rentas más bajas que el Gobierno llevaba tiempo rechazando. Eso lo ha aprovechado Coalición Canaria (CC), que en boca de Fernando Clavijo ha recriminado a Torres que no siga los pasos de su compañero de partido.
El de Puig es claramente un enfoque diferente al de las comunidades del PP, no solo porque su rebaja no contempla a las rentas de más de 60.000 euros, sino también porque no toca el impuesto al patrimonio —cuya bonificación al 100% supone una eliminación de facto beneficiosa para quienes lo pagan, que no son precisamente lo más necesitados—. Pero también se desmarca de la línea del Gobierno, que lleva tiempo rechazando esa deflactación con el argumento de que no beneficia en nada a las rentas más bajas, ya exentas de hacer de la declaración de la renta.
También la rechaza Torres, que se alinea con Madrid e insiste en ayudar a las rentas bajas y medias, pero siempre con ayudas y deducciones, no con una rebaja lineal ni con una deflactación.