Repensar el modelo económico del Archipiélago es un tema del que se habla cada día más. Desde múltiples manifestaciones ciudadanas hasta voces expertas apuntan en los últimos tiempos que quizás sería buena idea plantearse si el negocio turístico en las Islas es sostenible. Con frecuencia se debate la posibilidad de cobrar un impuesto a los visitantes por pernoctar, una medida que parece no convencer —de momento— al Gobierno de Canarias.
“Es imposible exceptuar a los canarios y no creemos que genere ningún tipo de rédito para el territorio”. Así de tajante se muestra el viceconsejero de Turismo del Ejecutivo regional, José Manuel Sanabria, en una entrevista concedida a Atlántico Hoy. Sus palabras se producen un día después de que el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) situara a las Islas como destino de sol y playa donde cada visitante gasta —de media— más dinero.
Tasa sí, impuesto no
El segundo de a bordo en el área dirigida por Jéssica De León explica que, en cambio, sí apuestan por aprobar un sistema de tasas para quienes quieran acceder a espacios naturales y otro tipo de infraestructuras públicas. “Lo hemos defendido permanentemente”, dice. Un ejemplo es la entrada que cobrará el Cabildo de Tenerife a partir de 2026 a todos aquellos que deseen conocer el Teide de cerca. Los ingresos serán destinados a su conservación.
Es probable que alguien —quizás usted, querido lector— se esté preguntando cuál es la diferencia entre una tasa y un impuesto por pernoctación. En realidad, en ambos lo que se busca es recaudar dinero, pero la diferencia está en el para qué. Si se trata del primer caso, por ejemplo, el objetivo es finalista: solo se puede emplear para cuestiones relacionadas con la actividad turística.

Arcas generales sin control
Pero al hablar del segundo supuesto la cosa cambia. Consiste en una recaudación que se une al resto de impuestos —tengan o no relación con el turismo— y se puede emplear para financiar cualquier necesidad que tenga la administración pública. Traducido, significa que se puede destinar asuntos tan variados como carreteras, sanidad, educación o vivienda. Sanabria detalla que van a unas arcas generales y se vuelve muy complicado hacerle un seguimiento.
Pone sobre la mesa que en ningún territorio se ha podido demostrar que el impuesto por pernoctación genere una limitación de acceso al destino. “No produce bondades especiales”, subraya el viceconsejero de Turismo del Gobierno autonómico. Su área no es la única que se ha pronunciado más de una vez sobre el tema, también lo ha hecho la Consejería de Hacienda, en manos de Matilde Asián.

"Muy injusto"
Asián defendió el pasado 13 de junio que no es posible aplicarlo porque sería “muy injusto” que los canarios tuvieran que pagarlo. Eso sí, en respuesta al diputado del PSOE Manuel Hernández Cerezo, defendió la posibilidad de estudiar su aprobación siempre y cuando alguien sea capaz de encontrar la fórmula de que los residentes en las Islas queden fuera de la ecuación.
Todo este debate se da en un contexto donde el gasto turístico en Canarias es mayor que en el resto de comunidades que viven también del sol y playa. Los últimos datos del INE señalan que cada visitante extranjero desembolsa en las islas una cantidad que está por encima de los 1.400 euros. El ISTAC incluso lo sitúa por encima de los 1.500. Sanabria sostiene que les parece relevante atraer un turismo con alto poder adquisitivo.
Promoción del destino
Apunta que las campañas de promoción de Canarias están enfocadas en diferentes nichos, mercados y tipos de visitantes. “No solamente a un turista de sol y playa, que quizás es el más conocido, pero hay muchísimos perfiles que nos interesan desde el deportivo hasta las familias o los seniors”, comenta. Asevera que lo importante es que se haya incrementado el gasto y mantener una cifra de turistas parecida a la de 2017.
“La estrategia es incrementar la cadena de valor de los productos turísticos. Significa aumentar la calidad de los productos que ofrecemos a nuestros visitantes, tanto en instalaciones e infraestructuras hoteleras y extrahoteleras, como en servicios”, prosigue. Indica que están desarrollando un plan de descarbonización junto a empresas públicas y privadas con la finalidad de reducir la huella de carbono.
Turismo responsable
“Aparte de eso, estamos haciendo numerosas campañas que aquí no se ven, pero en el exterior sí pedimos un turista más responsable con el territorio que consuma producto local y utilice el transporte público. Llevamos a cabo esa labor que tiene que ver además con sostenibilidad y con la competitividad del destino”, narra Sanabria.
El viceconsejero de Turismo del Gobierno de Canarias expone que el Archipiélago dispone de “numerosos atractivos en espacios naturales en atractivos medioambientales”. “También en nuestro espacio de disfrute, en la infraestructura turística, me refiero a esta hotelería que es de altísima calidad, somos muy competitivos también en ese en ese ámbito”, sentencia.
