"Debido a la gran acogida que hemos tenido en Alcampo La Laguna y al aumento en el volumen de trabajo y de clientes, nos vemos obligados a ampliar y mejorar nuestras instalaciones, nos trasladamos a EOS CLINICS, en avenida Tres de Mayo". Es un extracto del mensaje con el que 360 Clinics, la cadena de centros de estética en preconcurso de acreedores que ha cerrado clínicas por toda España, comunicó a sus clientas en La Laguna que cerraba y se trasladaba al local de Santa Cruz, el último en cerrar en la isla y que destapó todo el escándalo.

La cadena está completamente hundida, pero las clientas se han enterado cuando ha cerrado centros por toda la geografía nacional. Según denuncian muchas de las afectadas, 360 Clinics continuó vendiendo paquetes hasta el mismo día antes de cesar sus operaciones, manteniendo hasta el final una farsa que llevaba muchos meses mostrando síntomas.

La tendencia de cierres de 360 Clinics en Tenerife

Uno de los mejores ejemplos es, precisamente, el mensaje con el que la cadena informó a sus clientas de que trasladaban sus operaciones al centro EOS de Tres de Mayo, pues tras la excusa de la "gran acogida", "aumento en el volumen de trabajo y de clientes" y "ampliación y mejora de instalaciones" se encontraba, en realidad, una tendencia de cierres que nadie había augurado como sospechosa hasta que salió a la luz el preconcurso de acreedores y el cese de operaciones.

En Tenerife, 360 Clinics tenía tres centros y la filial EOS, cuatro en total. Según han relatado a Atlántico Hoy clientas afectadas del local que había en el centro comercial Añaza, en mayo vivieron lo mismo que las de Alcampo: un cierre y traslado al local EOS en Tres de Mayo, con la salvedad de que en aquel caso el anuncio se hizo con un papel colgado en la puerta.

A raíz de aquello, la historia es conocida: cancelaciones de citas, mensajes sin responder, llamadas sin descolgar... Un calvario para conseguir conseguir agendar sesiones hasta que, hace menos de un mes, explotó la burbuja y las clientas se vieron con sus sesiones pagadas (y en muchos casos financiadas), sus tratamientos sin terminar y las clínicas cerradas.

Denuncia por estafa

Hay miles de clientas afectadas por toda España (en Canarias se calcula que pueden ser entre 300 y 400 personas), y muchas ya se están organizando colectivamente con despachos de abogados para demandar a la cadena de estética.

Por un lado, pretenden lograr cobrar como acreedores en el proceso concursal de la empresa. Pero, por otro, muchas afectadas quieren denunciar por estada a 360 Clinics, en tanto en cuanto que presuntamente ocultaron a sus clientas la frágil situación financiera en la que se encontraba la empresa y estas siguieron contratando servicios hasta el mismísimo día antes del cierre.

Ocultación de información

En este contexto, muchas clientas de centros como el del Alcampo de La Laguna perciben los mensajes recibidos cuando cerraron sus locales como pruebas de la estafa, ya que las justificaciones que aportaba la empresa para el traslado trataban supuestamente de maquillar una realidad de cierres masivos y silenciosos. 

Otro de los ejemplos más claros es que, cuando cerraron todas sus clínicas hace menos de un mes, la empresa habló de un proceso de "reorganización interna" y cierre "temporal", todo para unos días después anunciar que había entrado en preconcurso de acreedores.