La lujosa cadena Adrián Hoteles pierde 5,3 millones por la pandemia

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Adrián Hoteles
Adrián Hoteles

El sector hotelero de Canarias se dio el año pasado un golpazo tremendo por el cierre forzoso de marzo a junio. Tras el fin del confinamiento, el retorno a la normalidad resultó a paso muy lento debido a la escasa llegada de turistas extranjeros. De hecho, algunos hoteles levantaron la persiana más tarde a la espera de que las reservas alcanzaran niveles remuneradores.El grupo Adrián Hoteles, perteneciente a Rafael Adrián Adrián, es uno de los más relevantes de la isla. Antes de la explosión del virus, figuraba entre los más rentables de toda la comunidad canaria. El año pasado no fue ajeno a las circunstancias del mercado turístico. Sus cuentas revelan el fuerte impacto que ha supuesto el coronavirus.

Expedientes de regulación

El grupo Adrián posee en Adeje tres hoteles. Dos de ellos tienen categoría cinco estrellas: son los Roca Nivaria y Jardines de Nivaria; además posee el cuatro estrellas Colón Guanahaní.El trío de alta gama suma 723 habitaciones y 540 empleados, aunque debido a los Erte, la plantilla media del año pasado se redujo a 230 personas. Los alojamientos del Grupo Adrián se nutren sobre todo de visitantes procedentes de Alemania, Reino Unido y Bélgica.

Números rojos

La facturación de los tres hoteles se desplomó en 2020 de 51 a 13,9 millones de euros. Los gastos no pudieron comprimirse al mismo compás. En consecuencia, los resultados de la cadena Adrián se dieron la vuelta y pasaron de 8,5 millones de beneficio a 5,3 millones de pérdida.

Patrimonio inmobiliario

Adrián ha venido contabilizando ganancias abundantes en el curso de los últimos años. Gracias a ellas acumuló un mullido colchón en forma de reservas sociales, que le han permitido encajar el déficit sin demasiados problemas.Al cierre de 2020, los fondos propios (capital más reservas) sumaban 93 millones. El dueño Rafael Adrián Adrián lleva invertidos en los tres complejos hoteleros 173 millones. Una vez superada la pandemia, las restricciones locales y las del Gobierno, las perspectivas para el sector hotelero canario en la temporada invernal son de una enérgica recuperación.

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