En una época en la que la venta de coches ha sufrido muchos altibajos debido a la falta de componentes y los problemas de logística, ambos derivados del COVID y de los conflictos bélicos, la startup que está digitalizando los concesionarios y venta de coches de segunda mano, Motoreto, está registrando un éxito fulgurante.
Su CEO y fundador, Marco Conde, ha conversado con Atlántico Hoy sobre su modelo de negocio y el papel de Canarias dentro de la compañía.
Pregunta: ¿Cómo nace Motoreto?
Respuesta: Nace de la necesidad de digitalización que detectamos en el sector de la distribución de venta de coches de ocasión. Nuestros clientes, concesionarios y distribuidores, necesitaban digitalizar no solo sus negocios, sino sus procesos, y así empezamos en 2020. Desde entonces hemos crecido mucho y muy rápido porque los concesionarios han dado cuenta que no podía dejar pasar esta oportunidad.
P: ¿Cuál es su nivel de implantación?
R: Trabajamos en toda España, aunque hay comunidades en las que tenemos una mayor penetración. Además estamos haciendo alguna cosita en el extranjero porque el hecho de ser 100% digitales nos permite penetrar en otros mercados de una forma muy ágil.
P: ¿Qué papel desempeña Canarias dentro de su estructura?
R: En Canarias tenemos un gran canal de de aprovisionamiento para ayudar a profesionales y concesionarios a renovar el stock, porque el hecho de que el turismo sea uno de los principales motores económicos hace que se necesite una gran rotación para dar entrada y salida a las flotas de vehículos de los rent a car. Por ello es un buen canal de captación para proveer a la red de concesionarios con las que trabajamos.
P: ¿Ha hecho los deberes la región en términos de digitalización?
R: Lo cierto es que es una de las comunidades donde hemos notado una mayor digitalización. Los concesionarios en Canarias están más adelantados que la media y va un pasito por delante. El archipiélago tiene unas condiciones de negocio muy particulares y se han dado cuenta antes que la mayoría de que había que adaptarse a lo digital. Esa necesidad la han visto y la están ejecutando de forma muy interesante.
P: ¿Cuál cree que será el impacto de la implantación de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE)?
R: Creo al principio habrá un momento de incertidumbre, casi más en el comprador que en el propio mercado. Será así porque muchas ciudades todavía no están gestionando las ZBE y muchas regulaciones tampoco son claras sobre qué tipo de vehículo se van a poder incluir y cuáles no. En el medio plazo nos veremos todos forzados a tener vehículos muy específicos para entrar en el centro de la ciudades, y yo entiendo que en algún momento el precio de estos vehículos, principalmente híbridos o eléctricos, deberá reducirse, porque si no será muy complicado su acceso para la mayoría de los compradores.
P: ¿Cuántas personas trabajan para Motoreto?
R: Somos 20 personas que movemos coches sin tocarlos. Nuestras dos grandes partes son el equipo de atención y trabajo con el concesionario y el equipo tecnológico, el cual se encuentra ubicado en Tenerife. Estamos bastante descentralizado y eso nos obliga y nos permite muchas cosas, como tener una mayor y mejor comunicación, ser más eficiente en ella y captar talento de otra manera. Algo que si fuera un trabajo presencial al uso no tendríamos.
P: ¿En qué se diferencia este modelo de trabajo de una startup con comparación con el tradicional?
R: Yo creo que hay dos puntos. Por un lado está la flexibilidad, en el sentido del teletrabajo, para agendar reuniones o llevar a cabo distintas iniciativas. El otro es trabajar en un entorno dinámico donde todos los días pasan cosas y eso te permite aprender y aportar valor a tu entorno profesional. Un entorno más tradicional está más encorsetado y puede ser muy monótono, pero en una startup como Motoreto todos los días pasan cosas, todos los días tenemos que aprender, reajustar, crear y proponer; y yo creo que eso la gente lo valora mucho.