Las compras por internet están asfixiando al pequeño comercio en Puerto del Rosario (Fuerteventura). En las últimas semanas, varias tiendas se han visto en la obligación de bajar la persiana porque la caída de los ingresos se ha vuelto insostenible ante un panorama donde plataformas como Shein, Temu, Vinted o Zalando ganan terreno a pasos agigantados.

Daniela Plotegher, presidenta de la asociación de empresarios en el municipio majorero, explica en declaraciones a Atlántico Hoy que lo han notado de manera especial en la venta tanto de ropa como de calzado. Detalla que el principal problema reside en el transporte por los gastos de envío y el tiempo de espera —a veces largo— hasta que llega la mercancía.

La inmediatez

“Con las compras por internet”, indica, “tienes el producto en poco tiempo”. Pone sobre la mesa que las ventas online son el principal inconveniente para el pequeño comercio en Puerto del Rosario unido al cambio de paradigma en la sociedad donde prima la inmediatez. “Estamos vaciando la economía de nuestra isla porque han cerrado tiendas”, lamenta.

Cuenta que durante el pasado mes de octubre hasta tres locales de ropa cesaron su actividad porque sus ingresos disminuyeron. Pide que las instituciones tomen medidas con el objetivo de ayudar a los autónomos a reducir todos los gastos que deben enfrentar. Asegura que en su negocio, por ejemplo, debe pagar unos 700 euros a la Seguridad Social cada 30 días.

"Está colapsando todo"

Todo unido, señala, a los impuestos. “Cuando tú no vendes y te cuesta llegar a final de mes, ¿cómo lo haces? Está colapsando todo”, exclama. “No soy economista, pero creo que si queremos mantener al pequeño comercio, tienes que ayudarlo porque, como es obvio, los grandes tienen mayor capacidad”, apostilla. “Así no vamos a llegar a ningún lado”, sentencia.

En definitiva, Plotegher defiende que es importante actuar cuanto antes antes de llegar “a un cierre total de todos los comercios”. “¿Si no después de qué vivimos? Esto le da vida a la sociedad, si no tienes locales abiertos, la capital está muerta porque no hay nada”, reflexiona la presidenta de la Asociación de Empresarios de Puerto del Rosario.

Concienciar

Pero la cosa no queda ahí. Sostiene que la clave también está en crear conciencia entre las nuevas generaciones. Desde la asociación organizan charlas en los institutos para explicar la importancia del comercio local y explicar a los adolescentes que detrás de cada pequeño negocio hay familias que dependen de ellos porque es su forma de ganarse la vida.

La situación no es exclusiva de Puerto del Rosario, sino que en el resto de la isla también padecen una realidad similar. Plotegher, que pertenece a la Cámara de Comercio de Fuerteventura, asegura que todos están en la misma línea: detectando que el volumen de ventas está decayendo y ya no es como hace algunos años.

Campañas con los clientes

“Se nota que el mismo ingreso no es el mismo de antes. La economía está cambiando al mismo tiempo que aumenta la dificultad de llegar a fin de mes para cualquier núcleo familiar. Todo eso influye”, expone. Cuenta que en alguna tienda centrada en el sector primario, por ejemplo, las ventas han caído un 40% en relación al año anterior.

Lo perciben —entre otras cuestiones— porque han llevado a cabo campañas comerciales con rasca y gana para sus clientes. Apunta que antes los premios salían sobre la marcha porque había mucho movimiento y ahora tienen que esperar hasta el final de la campaña para conocer a los ganadores.

Plotegher sentencia que los pequeños comercios son importantes porque dan seguridad. Incluso, dice, por la noche al estar los escaparates encendidos. “La economía en el lugar donde vivas es fundamental porque solo funciona si la economía interior va bien”, culmina.