El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ha salido al paso de las críticas de la oposición, que acusa a la institución de mantener 600 millones de euros “ociosos” en los bancos mientras presume de músculo económico. En una rueda de prensa para presentar el presupuesto insular de 2026, el mandatario fue tajante: “No son fondos inmovilizados; están comprometidos en obras adjudicadas y en ejecución”.
El nuevo proyecto de cuentas públicas, aprobado por el Consejo de Gobierno insular, asciende a 1.055 millones de euros, 69,6 millones más que el del ejercicio anterior, lo que supone un incremento del 7%. Morales destacó que el presupuesto refleja la fortaleza financiera del Cabildo y de la economía de la isla, además de la estabilidad del pacto de gobierno entre Nueva Canarias–Frente Amplio Nacionalista y el PSOE.
Récord de gasto social
El capítulo destinado a Políticas Sociales alcanza este año 345,9 millones de euros, la cifra más alta en la historia del Cabildo, y representa el 32,7% del presupuesto total. El aumento, de 62,6 millones respecto a 2025, convierte este bloque en el eje central de la acción de gobierno, con medidas específicas para ampliar las plazas sociosanitarias con fondos propios, ante la ausencia del nuevo convenio de dependencia con el Gobierno de Canarias.
Morales subrayó que el Cabildo no ha recurrido a endeudamiento ni créditos externos, pese a su capacidad para hacerlo. La deuda viva de la corporación insular se sitúa en apenas 765.903 euros, y descenderá hasta 382.951 euros a finales de 2026, una cifra que refuerza su imagen de solvencia.
La institución mantiene además remanentes de tesorería por 176,7 millones de euros, que, según el presidente, se incorporarán progresivamente a los presupuestos para financiar nuevas inversiones. “No se trata de dinero sin uso —aclaró—, sino de fondos asignados a proyectos adjudicados, algunos en ejecución y otros en fase administrativa”.
Centrado en las personas
El conjunto de los programas sociales y económicos asciende a 660,8 millones de euros, el 62,6% del total, lo que marca un nuevo récord en la historia del Cabildo. Morales aseguró que el objetivo de su gobierno es consolidar a la institución como el principal inversor público de la isla, impulsando proyectos estratégicos en materia de vivienda, carreteras, cultura, deporte y transición energética.

En total, el presupuesto contempla 220,1 millones de euros en inversiones, que incluyen grandes obras como el Museo de Bellas Artes de Gran Canaria, el nuevo pabellón de Infecar, la rehabilitación del Estadio de Gran Canaria, el Centro Insular de Deportes y la Ciudad Deportiva Gran Canaria, además de las expropiaciones necesarias para el futuro tren.
El área de Vivienda es una de las que más crece: su presupuesto aumenta un 30% con respecto al año anterior, un refuerzo que permitirá acelerar la construcción y rehabilitación de viviendas públicas y avanzar en políticas destinadas a jóvenes y familias con menos recursos.
Fortaleza financiera
Morales enfatizó que el Cabildo de Gran Canaria “goza de una salud financiera envidiable”, con capacidad de endeudamiento por encima de los 970 millones de euros si fuera necesario. No obstante, insistió en que la gestión responsable ha permitido financiar las políticas públicas sin recurrir al crédito.
La oposición, sin embargo, ha acusado al gobierno insular de “inacción y acumulación de recursos en los bancos”, una crítica que el presidente considera infundada. Según explicó, los remanentes no son dinero parado, sino partidas vinculadas a contratos en ejecución o pendientes de certificación. “No hay fondos ociosos, hay planificación y gestión responsable”, subrayó.
Además, recordó que el presupuesto de 2025, inicialmente de 985,8 millones, se transformó durante el ejercicio en un presupuesto real cercano a los 1.300 millones, tras la incorporación de remanentes y ampliaciones de crédito. “Ese es el resultado de una gestión eficiente, no de una administración inmóvil”, defendió Morales.
Continuidad del modelo de isla
El presidente insular enmarcó las nuevas cuentas en la estrategia global del Plan Transforma Gran Canaria, que moviliza casi 2.000 millones de euros en inversiones para modernizar la isla, impulsar la sostenibilidad y reforzar la cohesión social.

El presupuesto de 2026 refuerza, además, cinco grandes ejes de acción: la inclusión social y la igualdad de género; el impulso económico y del empleo; el desarrollo sostenible frente al cambio climático; la cultura y la protección del patrimonio; y la participación ciudadana.
Con ello, el Cabildo aspira a consolidar su papel como motor de inversión y garante de los servicios públicos en Gran Canaria, en un contexto de estabilidad institucional y solvencia económica.
Sello social
Con 1.055 millones de euros, el Cabildo afronta 2026 con el mayor presupuesto de su historia. Para Morales, las cifras demuestran que la corporación insular “combina responsabilidad financiera y ambición social”, garantizando la ejecución de proyectos clave y el refuerzo del bienestar de la población.
El debate político continuará en el pleno previsto para principios de diciembre, donde las fuerzas de la oposición volverán a cuestionar el uso de los remanentes y el ritmo de ejecución de las inversiones. Mientras tanto, el gobierno insular mantiene su mensaje: “Gran Canaria no tiene dinero parado, tiene una hoja de ruta clara para seguir avanzando".
