Agentes de la Policía Nacional han desmantelado un activo punto de venta de sustancias estupefacientes que operaba camuflado en una barbería-peluquería del centro comercial Bellavista, en San Fernando de Maspalomas, dentro del municipio de San Bartolomé de Tirajana. La actuación, desarrollada en el marco de una investigación judicializada por un delito contra la salud pública, se ha saldado con dos detenidos, el propietario del establecimiento y un trabajador del local.
La operación fue llevada a cabo de forma conjunta por Policía Judicial de las comisarías de Maspalomas y Telde, tras recabar diversas informaciones que alertaban de la posible existencia de un punto de venta de droga oculto bajo la apariencia de una actividad comercial lícita.
Las comprobaciones policiales permitieron confirmar los indicios iniciales y detectar un constante trasiego de personas en la barbería, un movimiento inusual que generaba alarma social en el entorno comercial.
Una tapadera para distribuir droga
A medida que avanzó la investigación, los agentes constataron que uno de los implicados contaba con antecedentes por delitos contra la salud pública y que presuntamente utilizaba el establecimiento como tapadera para la distribución de droga, aprovechando la afluencia habitual de clientes para pasar desapercibido.
El dispositivo policial se amplió a otros espacios vinculados a los investigados, entre ellos un local contiguo alquilado por uno de los detenidos y su domicilio en el municipio de Telde, donde se localizó parte de la sustancia intervenida.
Cocaína, hachís y material de distribución
Durante los registros practicados, los agentes intervinieron 144,06 gramos de cocaína y 5.425 gramos de hachís, además de material destinado a la manipulación, dosificación y distribución de las drogas. También se incautaron efectos informáticos y electrónicos relacionados con la actividad investigada.
La actuación policial culminó con la detención de dos varones, propietario y empleado del establecimiento, y con la desarticulación definitiva del punto de venta, poniendo fin al malestar que venía afectando a la zona.
Tras ser puestos a disposición de la autoridad judicial competente, el propietario del local ingresó en prisión, según ha informado la Policía Nacional.