La primavera ha llegado, y con ella, la naturaleza de Canarias brilla más que nunca. Tras las recientes lluvias y la mejora del clima, los paisajes canarios se presentan en su máximo esplendor, listos para ser descubiertos. Con la llegada del buen tiempo, es el momento perfecto para explorar y adentrarse en los rincones más remotos y hermosos de las islas, muchos de los cuales parecen haber despertado de su letargo invernal.
National Geographic, en su última selección de lugares recomendados, ha incluido una ruta canaria que no te puedes perder. Este destino natural no solo destaca por su belleza, sino también por su valor ecológico y la riqueza de su flora y fauna. Entre las maravillas que la famosa publicación propone, se encuentra un rincón escondido de Gran Canaria: Los Tilos de Moya.
Un bosque único en el Parque Rural de Doramas
Situada en el interior del Parque Rural de Doramas, en el municipio de Moya, la Reserva Natural Especial de los Tilos de Moya es una joya de la biodiversidad canaria. Este lugar es uno de los últimos reductos de laurisilva en la isla, un tipo de bosque subtropical que ha sobrevivido desde la Era Terciaria. Si hay algo que destaca en Los Tilos de Moya, es la exuberante floración que recubre todo el sendero, ofreciendo a los visitantes una experiencia única al adentrarse en este ecosistema protegido.
Los caminos de los Tilos de Moya permiten descubrir especies vegetales y animales únicas, muchas de las cuales se encuentran en peligro de extinción. Entre ellas, destaca la cresta de gallo y la salvia amarilla, dos plantas que se resisten a desaparecer a pesar de las amenazas de urbanización y cambio climático.
@improfurgo Por fin fui a esta zona que tanto me habéis recomendado... y menudo acierto, una ruta guapísima. ya para guinda al pastel uno de los miradores más chulos para mí de la isla. #lostilosdemoya #moya #tilos #sanjosedecaideros #improfurgo #furgocamper #islascanarias #grancanaria #canarias #galdar #teatro #mirador #atardecer ♬ sonido original - Improvisando en Furgoneta
Una experiencia completa
Al llegar a Los Tilos de Moya, los visitantes tienen la oportunidad de adentrarse en un sendero circular de 2 km, un recorrido que atraviesa este bosque de laurisilva y permite disfrutar de su increíble biodiversidad. Mientras recorres el sendero, es posible ver algunas de las especies que habitan el bosque, como las ranitas de San Antonio o la musaraña de Osorio, dos pequeñas criaturas que forman parte integral de este ecosistema tan especial.
Para quienes deseen profundizar en su visita, el Centro de Interpretación situado en la entrada del Barranco de los Tilos ofrece información detallada sobre la flora y fauna que habita en la zona, así como sobre la historia geológica del lugar. Aquí se puede aprender más sobre lo que se está viendo en el sendero, lo que convierte la visita en una experiencia mucho más enriquecedora.
Un recorrido por la Selva de Doramas
Los Tilos de Moya forman parte de lo que alguna vez fue la Selva de Doramas, un extenso bosque que cubría gran parte del norte de Gran Canaria.
Aunque hoy en día solo queda una pequeña parte de este enorme ecosistema, Los Tilos sigue siendo un testimonio de la antigua vegetación que caracterizaba la isla antes de la llegada de los humanos y la urbanización. La ruta te lleva a través de esta historia natural, permitiéndote ver cómo la laurisilva ha resistido el paso del tiempo y sigue siendo uno de los entornos naturales más impresionantes de las Islas Canarias.
Un destino recomendado por National Geographic
Los Tilos de Moya ha sido seleccionado por National Geographic como uno de los destinos más imprescindibles para este mes de abril, y no es para menos. Este bosque, lleno de vida y naturaleza, es uno de esos lugares que ofrece una conexión profunda con la tierra, permitiendo a los viajeros desconectar de la rutina y sumergirse en un entorno puro y salvaje.
Si eres amante de la naturaleza, la aventura y la conservación ambiental, no puedes dejar pasar la oportunidad de explorar Los Tilos de Moya. Este rincón de Gran Canaria no solo te ofrecerá unas vistas impresionantes y un contacto cercano con la flora y fauna locales, sino que también te permitirá vivir una experiencia única en uno de los ecosistemas más valiosos del archipiélago.