La obra de la reposición de las cubiertas de la catedral de La Laguna ha sido premiada internacionalmente en un congreso de Melbourne por la Internacional Federation for Structural Concrete (Fib), que le ha otorgado el primer premio en "estructuras sobresalientes de hormigón".
En un comunicado remitido por el Obispado de Tenerife se explica que la asociación Fib promociona y desarrolla los estudios científicos y de las aplicaciones en el campo de las estructuras de hormigón.
Los criterios que se han tenido en cuenta han sido el concepto estructural, los detalles constructivos, la apariencia estética, los procesos constructivos y la calidad de ejecución de la estructura, así como los aspectos medioambientales de proyecto y ejecución, la durabilidad, la sostenibilidad de la solución, la contribución al desarrollo y el progreso de las construcciones de hormigón.
Muy felices por el Premio ACHE para proyecto de la Cubierta de la Catedral de la Laguna en el que participamos https://t.co/PIsQkIXOLa pic.twitter.com/LaLgMVLNYr
— modelical (@modelical) 3 de mayo de 2017
Según la nota, el avanzado estado de deterioro del templo, que ocupa un destacado lugar dentro del centro histórico de San Cristóbal de La Laguna, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1999, hizo necesario reponer nuevamente todas las cubiertas, conservando el resto del edificio.
La reposición arranca, explica el obispado, en la parte sana de las pilastras existentes, por debajo de los capiteles y comprende las bóvedas de cubrición de las tres naves de la catedral, las capillas laterales, el crucero donde se sitúa la cúpula principal y el deambulatorio.
La solución adoptada respeta la geometría de la catedral de 1913, mejorando tanto su apariencia, al ajustar todas sus proporciones a las áureas, como las condiciones de ventilación e iluminación.
Interior de la catedral lagunera | TWITTER CATEDRAL LA LAGUNA
Las nervaduras de las bóvedas de crucería y de la cúpula principal, propias del estilo neogótico del edificio, están ejecutadas en hormigón autocompactante con armaduras de fibra de vidrio y unidas monolíticamente con los triángulos esféricos que completan las cúpulas.
Cien años después, los métodos modernos de la ingeniería estructural y las ciencias de los materiales han permitido reducir a niveles aceptables las incertidumbres asociadas con tecnologías novedosas.
"El empleo simultáneo de diferentes técnicas, procedimientos y materiales poco habituales o innovadores hacen que el proyecto y la obra de reposición de las cubiertas, por su singularidad, estén a la altura de la importancia histórica y social del edificio y de su entorno", destaca el comunicado.
La experiencia adquirida, añaden, se podrá poner al servicio de futuras obras, tanto históricas como convencionales.