Opinión

23-J: Mentiras y gordas

Emprendedor y empresario

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Se sabe que se puede fumar durante años y seguramente no pasa nada. ¿Piensan que estoy mintiendo? ¿Sabían que la cantidad de gente que muere por diabetes es equivalente a tres veces la gente que muere por fumar? ¿Sabían a su vez que la causa que mas cáncer de pulmón provoca no es un cigarrillo, es su ADN?

Hice el experimento, utilicé estos argumentos (totalmente inventados) con algunos amigos, el resultado es que la mitad los creyeron, es cierto que muchos de ellos confían en mí, no tienen información específica sobre el tema y además eran fumadores.

Esto demuestra que utilizamos el sesgo de confirmación en la manera que nos informamos y que los comunicadores lo saben y nos dan lo que queremos. Uno no lee el Sport para encontrar una alabanza al Real Madrid o ve el Chiringuito buscando lo contrario. Por ello, los medios se escoran más en sus posiciones porque saben que nuestro sesgo de confirmación es su principal aliado y también que no queremos leer críticas a nuestras emociones.

23-J

Estamos a solo unos días de las elecciones generales. Esta ha sido la campaña más emocional que recuerdo y, sin embargo, tengo la sensación de que la siguiente lo será aún más. Vemos a gente a nuestro alrededor, en nuestro trabajo, en nuestro entorno, en nuestras redes sociales animar a su partido político como si de un partido de fútbol de máxima rivalidad se tratase. Propuestas: ninguna.

Personalmente, he ido perdiendo el interés por la política paulatinamente, aun así, trato de estar informado, y no recuerdo haber oído en total durante esta campaña más de cuatro propuestas serias. Por serias me refiero a algo que esté en un programa que se exponga en mítines, debates o entrevistas y que sean creíbles y/o (medio) sensatas.

Es más, la mayoría de nosotros como votantes ni siquiera nos centramos en votar a un partido o un candidato con ilusión por su proyecto o su figura. Todo lo contrario, se trata de votar en contra: contra el sanchismo, contra las derechas, contra los rojos, contra los independentistas… las peores costumbres del fútbol trasladadas al marco de la política.

Y es que hemos llegado a este punto en el que la inmensa mayoría hemos dejado que lo emocional se apodere de nuestro voto, algo que en teoría debería ser una de las decisiones más racionales a tomar.

Todo es mentira… o cambio de posición

La campaña comenzó con una entrevista al actual presidente por parte de Carlos Alsina en la que el periodista le preguntaba por qué había mentido tanto y Pedro Sánchez le contestaba que no había mentido, que había cambiado de posición en muchos temas por el interés de España.

Después llegamos al debate en el que se acusó al candidato popular Núñez Feijoo de mentir en varias de las afirmaciones que había hecho. Se demostraría posteriormente que algunas de esas afirmaciones eran efectivamente falsas, mientras que otras supongo que serían “cambios de posición”.

'Cherrypicking'

El cherrypicking (literalmente «selección de cereza») es un acto de manipulación mediante el cual, de todos los datos disponibles sobre una cuestión, se escogen solo aquellos que interesan, ignorando los que no. Sin utilizar un término tan moderno, esto vendría a ser una media verdad, de toda la vida. Y es que una verdad a medias será, tarde o temprano, una mentira completa.

Lo cierto es que todos los políticos y sus voceros (medios de comunicación afines, tuiteros, equipos de redes sociales, etc.) utilizan esta estrategia haciendo valer estadísticas o datos para alabar su gestión o para criticar la de su oponente, pero tapándonos o recortando la mitad de la foto.

Conclusión

Las palabras correctas dichas de la manera adecuada y por el comunicador en cuál se confíe pueden cambiar las creencias de otros. Y hoy en día, con las redes sociales y los medios de comunicación instantáneos, se puede manipular el mensaje hasta llegar al punto en el que después de muchas mentiras ya no nos creamos nada… o solo lo que nos conviene creer. En ese peligroso camino estamos.

Cuando periodistas, políticos, empresas, gobiernos, nos mienten o manipulan los datos para mostrar una verdad adulterada de manera sistemática, nos quedan dos caminos: el hastío o el forofismo.