El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha decidido modificar los pliegos de condiciones para la concesión administrativa del quiosco de la Alameda de Colón, un emblemático establecimiento en el centro de la ciudad.
La principal modificación es la eliminación del requisito de adaptar el sótano a la normativa de accesibilidad, que en el anterior pliego otorgaba hasta 5 puntos a la reforma integral de los aseos subterráneos —siempre que se adaptaran a la normativa de accesibilidad—.
Análisis técnico
La variación se sostiene en un análisis técnico que ha determinado que cumplir con estos requisitos sería muy difícil de implantar, tanto por la configuración del espacio como por el elevado coste de las obras.
En su lugar, el nuevo criterio de adjudicación permitirá valorar proyectos de reforma sin la obligación de hacerlos accesibles, siempre que el espacio se destine únicamente a uso interno del personal.
30 días más de plazo
Esta modificación también impide que los licitadores puedan incrementar la capacidad de la terraza como compensación por la reforma del sótano, lo que evita posibles desigualdades en la competencia.
Esta decisión busca evitar barreras de entrada a los licitadores y fomentar la participación en el concurso público, asegurando que el proceso de adjudicación no se vea afectado por la dificultad de realizar ciertas obras.
Con estos cambios, el plazo de presentación de ofertas se amplía en 30 días naturales, contados a partir de la publicación del nuevo anuncio en la Plataforma de Contratación del Sector Público.
Un espacio con historia
El quiosco de la Alameda de Colón es un inmueble municipal situado en pleno barrio de Triana, junto a la Plaza de Cairasco y el Gabinete Literario, en un entorno de gran afluencia de público.
El espacio cuenta con una superficie de 14,86 m², además de tres sótanos de 83,47 m², baños anexos de 16,90 m² y una terraza de 81,75 m² con capacidad para 12 mesas.
Concesión de cinco años
El ayuntamiento ha impulsado este nuevo proceso de concesión con el objetivo de recuperar la explotación del quiosco como bar-cafetería, un uso tradicional de este espacio que ha tenido diversas etapas a lo largo de los años.
Según el pliego, la concesión será por cinco años, con posibilidad de prórroga por otros cinco.
Reactivar sin retrasos
La modificación de los pliegos responde a la necesidad de agilizar la licitación y garantizar la explotación del quiosco en el menor tiempo posible.
Las autoridades han señalado que la exigencia de adaptar el sótano podía haber retrasado el proceso o incluso dificultado su adjudicación, por lo que se ha optado por una solución más flexible para fomentar la participación de empresas interesadas.
Con la ampliación del plazo de presentación de ofertas y la corrección de las condiciones del pliego, el ayuntamiento espera atraer a un mayor número de propuestas y garantizar la reactivación de un espacio emblemático en el corazón de la ciudad.