En Las Palmas de Gran Canaria hay 150 colegios de Infantil y Primaria. Una amplia variedad para elegir dónde inscribir a niños y niñas para su educación, pero en la que entran más factores para lograr una matrícula, desde si se vive cerca del centro hasta la renta familiar. Y esto último puede ser lo más importante para conseguir una plaza, sobre todo si se observa con más detenimiento el mapa de los colegios ubicados en la capital.
De los 150 centros de Infantil y Primaria, lo más curioso es que 76 son públicos, mientras que casi la otra mitad (74), son privados y concertados. Esta balanza más o menos equilibrada muestra a su vez las desigualdades económicas entre los barrios de la ciudad. Los mapas de Másgeografía revelan el por qué.
Según los barrios
Como se puede observar en los mapas, el reparto no es homogéneo. Dos de cada tres colegios privados se concentran en zonas de mayor renta, como Tafira Alta o Vegueta-Triana, donde superan hasta por siete a los públicos. En cambio, en Tamaraceite o La Isleta es la red pública la que sostiene el derecho a la educación.
De los pocos privados o concertados situados en áreas con una renta menor, todos son religiosos, como San Juan de Dios, San Juan Bosco, San Miguel Arcángel y San Martín de Porres.

Acceso a la educación
El geógrafo Víctor Jiménez Barrado, encargado del proyecto, señala que “los datos son muy claros”. Aunque resalta que “no se trata de un ataque a la educación privada”, ve relevante apuntar que “la mitad de la oferta es privada y está en los barrios más ricos”. A esto se suma una característica clave de este tipo de centros: “Un colegio privado, además de educar, es una empresa que necesita beneficios. En cambio, la escuela pública tiene una misión única: enseñar”.
A pesar de estas confrontaciones entre sistemas, que se ven también en ámbitos como la sanidad, ante el panorama del mapa educativo de la capital grancanaria, el geógrafo también indica que, teniendo en cuenta las plazas escolares, “sin la privada sería imposible sostener la educación en la ciudad, porque casi la mitad de la oferta depende de ella”.