CC y PP critican la nueva partida de dinero para el Carnaval 2022 en Las Palmas de Gran Canaria

Ambos partidos no comprenden de dónde sale ese dinero y por qué es necesario

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Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria. / Efe
Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria. / Efe

Francis Candil, portavoz de Coalición Canaria (CC) y Pepa Luzardo, portavoz del Partido Popular (PP), ambos en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, han criticado la partida de 2,2 millones de euros para el Carnaval de 2022 que se ha aprobado en el pleno extraordinario de este miércoles.

Candil dijo que se ha visto “una convocatoria para inyectar dos millones y medio de euros a la Sociedad de Promoción” que, según el nacionalista, “no son para arreglar problemas de la vivienda en la ciudad ni para asuntos sociales, sino para inyectar dinero a un carnaval que ya estaba presupuestado”.

La concejala de Servicios Públicos y Carnaval, Inmaculada Medina, dijo en atención a los medios de comunicación que "esto es una manera hipócrita y cínica de actuar de la oposición", y añadió: "Estamos hablando de un incremento para una fiesta que es la más importante de la ciudad. No están pensando en los recursos económicos que genera el Carnaval y la industria que mueve".

"No ha habido explicaciones"

“No hemos asistido a ninguna explicación sobre de dónde viene este gasto extraordinario”, sentenció Candil, quien definió al grupo de gobierno como “el gobierno de las ocurrencias. “Hay actos que este Ayuntamiento ha adelantado con total descaro porque estamos en un año electoral”, apostilló.

Luzardo ha catalogado las fiestas del próximo año como “el peor carnaval de la historia del municipio”. La popular destaca que han costado 4,2 millones de euros por sumar los 2,5 millones que ya estaban recogidos en el presupuesto municipal y los 1,6 millones en remanentes.

La portavoz del PP ha lamentado que el Carnaval del pasado verano, que considera “el menos participativo” haya costado a los ciudadanos “más que nunca”. Agregó que “El PSOE siempre está de por medio cuando se malgasta el dinero de una forma obscena”. Además, considera injustificable “que para unas fiestas que en 2015-2016 costaban 1,5 millones de euros ahora la ciudad deba pagar 4,1 millones de euros”.