Imagen de archivo de la playa de Las Canteras, en Las Palmas de Gran Canaria./ Tony Hernández
Imagen de archivo de la playa de Las Canteras, en Las Palmas de Gran Canaria./ Tony Hernández

Más de 25 rescates en un mes: Las Canteras encara el verano con menos socorristas de los necesarios

El verano arranca con menos socorristas de los previstos y decenas de intervenciones en la playa capitalina

Alberto Ley

La situación en la playa de Las Canteras, en Las Palmas de Gran Canaria, vuelve a estar bajo lupa. Con el verano ya en marcha, el número de rescates no deja de aumentar y el servicio de socorrismo continúa funcionando por debajo de los niveles recomendados. Entre 25 y 30 intervenciones acuáticas se han registrado desde el inicio de la temporada estival, según confirma el portavoz del sindicato Unión de Socorristas de las Islas Canarias (USIC), David Molina.

Dos paradas cardiorrespiratorias

Más allá de los rescates a bañistas en riesgo, el equipo también ha tenido que atender dos paradas cardiorrespiratorias recientes. Una ocurrió fuera del horario oficial de servicio y la otra en el interior de un supermercado cercano, donde intervinieron al estar en las inmediaciones. “No solo trabajamos en la playa. Somos los primeros intervinientes también fuera del agua”, recuerda Molina.

Plantilla bajo mínimos

A pesar de que la previsión era reforzar el servicio con 25 nuevas incorporaciones, solo 6 personas se presentaron a las pruebas físicas. “Uno de ellos incluso tuvo que ser rescatado durante la prueba, y aun así fue contratado”, afirma Molina, que alerta de la dificultad de cubrir una playa como Las Canteras con un equipo claramente insuficiente.

El portavoz sindical denuncia que el número actual de profesionales está por debajo del mínimo exigido en los planes de seguridad, lo que compromete la respuesta ante situaciones críticas. “Este verano, como todos, tenemos miles de bañistas cada día, pero cada vez somos menos para vigilarlos.”

Condiciones precarias

El escenario no ha cambiado respecto a lo denunciado en junio: jornadas de 10 horas, salarios en torno a los 1.000 euros mensuales y torretas de vigilancia deterioradas siguen siendo la norma. “Las condiciones no solo no han mejorado, sino que la gente ya no quiere entrar a trabajar con nosotros. No compensa”, afirma el representante de USIC.

Además, las condiciones ambientales —altas temperaturas, exposición solar extrema y falta de material de protección adecuado— siguen pasando factura. “Sin EPIs adecuados, sin descansos y sin reconocimiento profesional, cada año perdemos más socorristas formados que se van a otros sectores”, lamenta.

Un servicio al límite

Los socorristas de la playa capitalina llevan años reclamando una revisión del convenio colectivo, mejoras salariales y una mayor vigilancia en el cumplimiento de los contratos por parte de la empresa adjudicataria. “No se trata solo de condiciones laborales, sino de seguridad ciudadana”, advierte Molina. “Mientras no se tomen medidas, seguiremos arrastrando los mismos fallos cada temporada.”

En 2024, solo en el término municipal de Las Palmas de Gran Canaria, se contabilizaron 244 rescates a nado, 50 con moto acuática y 600 asistencias sanitarias. “Todo eso con los mismos medios de siempre. Este año ya llevamos más de 25 rescates en pocas semanas, y aún queda mucho verano por delante.”