Un informe interno de la Policía Local, al que ha tenido acceso Atlántico Hoy, señala que hubo “deficiencias en medidas antiterroristas” durante la primera fase del concurso de murgas del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria.
El documento, firmado este martes por dos agentes que estuvieron de servicio esa noche, va dirigido al jefe responsable de zona. hacen referencia a que el vallado para impedir el paso a vehículos no autorizados era insuficiente e inadecuado.
Sin control efectivo
“Damos cuenta a usted que realizando labores propias del servicio, se ha detectado deficiencias graves en la implementación de medidas de seguridad antiterroristas Nivel 4”, señalan.
Además, ponen sobre la mesa que se ha constatado la ausencia de agentes de la autoridad en esos puntos dificultando, dicen, la realización de un control efectivo de la seguridad del evento.
Versión del Ayuntamiento
Fuentes del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria aseveran en declaraciones a este periódico que la Policía Nacional es la competente en esta materia. "Ellos emiten un informe de recomendaciones que el Consistorio incorpora como obligación en el plan de seguridad", resaltan.
"La Policía Nacional, en Carnaval establece un perímetro externo con medidas antiterroristas y sus técnicos son los que establecen si la medida es ligera", apostillan.
Las condiciones de la calle
Para ello, dicen en la corporación municipal, se tienen en cuenta "las condiciones de la calle o el punto tiene que ser permeable para entrar de vehículos de emergencias como ambulancia y bomberos con la instalación de vallas, maceteros o cualquier otro elemento poco pesado; o pesado, con la instalación de vehículos de gran tonelaje".
"Por ejemplo, en las vías de evacuación se ponen medidas ligeras. El Ayuntamiento lo que hace es seguir las recomendaciones de la Policía Nacional en materia antiterrorista", sentencian.
Un vehículo estacionado
El informe expone que en el momento de comprobar los hechos relatados había una gran afluencia de personas transitando por la zona acotada. Los policías subrayan que dentro del perímetro había un único vehículo estacionado sin conductor en su interior y sin autorización visible.
Cuentan también que al realizar las verificaciones correspondientes se presentó un hombre que se identificó como el encargado de seguridad del evento y del propio coche.
El hombre, denunciado
Según los agentes, el varón aseguró que tenía autorización verbal por parte de la Policía Nacional —eso sí, aseguró que no contaba con ella por escrito—. El informe recoge que ante la falta de documentación que respalde la presencia del vehículo y por motivos de seguridad, se le pidió que lo retirara.
Como el hombre se negó fue denunciado por “no obedecer las órdenes de los agentes de la autoridad encargados de la vigilancia del tráfico”. “Reseñar que en el resto de los cruces de posible acceso al evento había exclusivamente vallas abandonadas sin ningún tipo de parapeto”, sentencia el documento.
