El concejal Ramírez firma el permiso para el dispositivo de seguridad, pero los 'boteros' no se fían

La falta de técnicos ha derivado a que sea el propio encargado de la Concejalía de Movilidad el que firme la resolución para garantizar la seguridad de la Avenida Marítima durante la regata

Ariadna Martínez / G. Díaz Medina

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El sábado habrá regata tras la firma del permiso del dispositivo de seguridad / LPA VISIT
El sábado habrá regata tras la firma del permiso del dispositivo de seguridad / LPA VISIT

En teoriia este fin de semana se podrán celebrar las regatas programadas de Vela Latina con la afición animando y disfrutando de la competición desde tierra. 

Atlantico Hoy ha podido confirmar a través de la Concejalía de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria que ha sido el propio concejal del área, José Eduardo Ramírez, quien ha firmado el permiso para el dispositivo de seguridad de tráfico que se establece en la Avenida Marítima, pero después de una reunión llevado a cabo por los presidentes de los 13 botes en la tarde de este miércoles, prefieren esperar al viernes a las 15:00 horas para tomar una decisión.  Los ´boteros" no se fían a pesar de que Ramírez ha segurado que "está todo arreglado".

Falta de técnicos

La celebración de Vela Latina del fin de semana se vio en peligro ante la falta de la firma de la resolución para establecer el dispositivo de seguridad en la Avenida Marítima, desde donde la afición ve la regata, debido a la falta de un técnico que se encargara de la autorización. 

Todos los presidentes de los clubes que forman la familia de la Vela Latina rubricaron un escrito en el que amenazaban con dejar a la flota de botes en tierra, a partir del sábado, si los aficionados no podían seguir las regatas desde tierra con todas las garantías. “No han activado el dispositivo de tierra, esencial para el seguimiento y seguridad de las competiciones", indican en el comunicado.

Esta suspensión de la competición fue, según añadían los presidentes de los Clubes y Botes de Vela Latina, "la primera de las medidas que se adoptarán para garantizar que el deporte pueda continuar practicándose con todas las garantías de seguridad en la bahía de Las Palmas de Gran Canaria".

Este medio ha podido confirmar que el mismo martes se llevó a cabo una reunión entre el vicepresidente del Cabildo, Augusto Hidalgo, administración de la que depende la vía (GC-1) y el concejal de seguridad del Consistorio, Josué Íñiguez, para intentar buscar una salida a este embrollo, al que al final le ha puesto solución el propio concejal de Movilidad, José Eduardo Ramírez.