La gerente de la Universidad de La Laguna (ULL), Lidia Pereira, ha expuesto ante el Claustro que la institución necesitaría duplicar su nivel actual de financiación para poder afrontar sus principales desafíos. Lo ha hecho durante la presentación del proyecto presupuestario de 2026, que alcanza los 181 millones de euros, un 4 % más que en el ejercicio anterior.
La universidad ha informado en un comunicado que el documento aún debe ser ratificado por el Consejo de Gobierno y por el Consejo Social, pasos necesarios antes de su aprobación definitiva.
Contexto financiero y límites presupuestarios
Pereira ha recordado que, tras la pandemia, las universidades dispusieron durante varios años de la posibilidad de incorporar remanentes y operar sin las reglas fiscales habituales. Esa situación excepcional terminó en 2024, en un escenario además marcado por la prórroga del presupuesto estatal, lo que complica la planificación a medio y largo plazo.
La gerente también ha señalado que la LOSU fija para 2030 el objetivo de destinar a las universidades públicas el 1 % del PIB regional. En ese contexto, el techo de gasto autonómico para 2026 se ha establecido en 200,9 millones, mientras que el presupuesto de la ULL se sitúa en 181,5 millones.
Origen del incremento y financiación disponible
El aumento respecto a los 171 millones del año anterior responde a la incorporación de partidas finalistas, diversos trasvases desde otros programas, las subidas retributivas del profesorado, el refuerzo de partidas de funcionamiento y los créditos del programa María Goyri destinados a talento investigador.
En términos reales, la financiación procedente del Gobierno de Canarias ha crecido un 1,56 %, una cifra que la institución considera insuficiente para sostener sus necesidades estructurales.
Demandas y diferencias entre lo solicitado y lo concedido
Pereira ha explicado que las universidades públicas solicitaron al Ejecutivo regional 25 millones adicionales, de los que 13,7 millones corresponderían a la ULL. Finalmente, el Gobierno autonómico aporta 4,3 millones para ambas instituciones, lo que deja una brecha significativa respecto a lo planteado.
La gerente insiste en la necesidad de un modelo plurianual de financiación y sostiene que, con los recursos actuales, la universidad no puede atender de forma adecuada los retos acumulados.
Posiciones de los grupos claustrales
Los representantes del Claustro han expuesto sus valoraciones. PTGAS ha reclamado abordar la segmentación entre personal funcionario y laboral, además de un plan integral de formación. COMPAS ha reiterado el objetivo de alcanzar el 1 % del PIB en educación superior y ha lamentado la ausencia de partidas para alojamiento e igualdad.
ACE ha criticado la limitada financiación regional y la insuficiencia de recursos para residencia estudiantil, mientras que Avanza ha definido el proyecto como continuista. Por su parte, el Programa Alternativo para el Profesorado lo ha considerado coherente, aunque insuficiente para cubrir las necesidades reales.
Próximos pasos en organización y planificación
Pereira ha añadido que ciertos aspectos de la planificación organizativa no pueden integrarse en la actual estructura presupuestaria. En este sentido, ha anunciado la ampliación del Servicio de Recursos Humanos y la incorporación en 2026 de un Plan de Ordenación de Recursos Humanos.
El rector, Francisco García, ha coincidido en que el incremento real apenas supera los dos millones de euros y ha reiterado que la meta debe ser alcanzar el 1 % del PIB para las dos universidades públicas canarias.