“El IMAS sigue sin atender a las personas con discapacidad”, destaca con rotundidad Ana Mengíbar, presidenta de Queremos Movernos, dando respuesta a Atlántico Hoy cuando nos hemos interesado por la denuncia pública que realizaron hace dos meses, alegando que no les daban cita para ser atendidos por los recursos del Ayuntamiento de Santa Cruz para atención social.
Indica la presidenta que desde hace 16 meses, las personas que han pedido cita siguen esperando una respuesta, lo que repercute en el día a día y en sus especificidades.
Falta de personal
Según explica Mengíbar, la falta de personal en el Instituto Municipal de Atención Social (IMAS) puede estar detrás del retraso que denuncian. “Para gestionar las ayudas tienen a una persona, pero seguimos sin agenda y sin cita desde julio de 2024”, reitera.
Para las personas que sufren algún tipo de discapacidad, las largas esperas pueden suponer no sólo un incremento en la ansiedad sino la pérdida de un tiempo valioso para mejorar su calidad de vida, sobre todo si están esperando algo tan sencillo y tan vital como una ayuda para adaptar el tamaño de una puerta para facilitar el paso de una silla de ruedas o un baño a una persona con movilidad reducida.
Larga espera
“Hace un mes, aproximadamente, nos reunieron con la intención de que aportásemos ideas para la celebración del Día de la Discapacidad y, la verdad, nos quedamos todos callados porque, ¿cómo vas a celebrar lo que no has hecho?”, indica Mengíbar, apuntando que tampoco para esto contaron con todas las asociaciones.
Por otro lado, añade que el gobierno municipal lleva años trabajando en la modificación de las ayudas, “en un proyecto con las bases más completas de toda Canarias y, sin embargo, están tardando en otorgarlas, con un retraso de más de año y medio”.
Incremento de gasto
Además, el coste de los productos y sobre gasto familiar para afrontar las necesidades de la discapacidad altera el presupuesto, según denuncian, indicando que las necesidades imperiosas como poner gafas a un niño o una férula para movilidad, desbaratan cualquier economía doméstica.
“Nadie se imagina cómo se disparan los gastos en una familia donde hay un miembro con una discapacidad”, exclama. Añade que Queremos Movernos tiene constancia de ayudas aprobadas para terapias infantiles y que siguen retrasadas. “Y claro, como no han pagado las de 2024, seguramente en 2025 estas familias no han podido complementar estas terapias a los niños”.
Citas e información
Otro caso que detalla Mengíbar a este medio es la espera de más de tres años a la que debe hacer frente una familia para dejar de utilizar un baño que no está adaptado. “Imagina que, cada vez que tienes que duchar a una persona con discapacidad, tengas que hacerlo por fuera de la bañera, sobre unas sillas y colocando sobre el suelo un montón de toallas para que absorban el agua. ¡Y así todos los días!”, detalla..
Desde la asociación denuncian la falta de atención e información, algo que afecta principalmente a familias que se ven tras un parto con un bebé que padece una discapacidad. “¡Es que ni siquiera en estos casos están dando citas!”, subraya.
Ayudas pendientes de cobro
Reitera Mengíbar que existen personas que siguen esperando ayudas que fueron solicitadas en 2023 y 2024. Por otro lado, comenta que el Ayuntamiento cuenta con un proyecto de respiro familiar en trámite desde hace seis años, sin que se termine de activar.
Este próximo miércoles, 3 de diciembre, se conmemora el Día Internacional de las Personas con Discapacidad. Al respecto, desde la Asociación apelan a un mayor compromiso por parte del gobierno municipal “y que trabajen pensando en estas personas durante todo el año”.
“Desde Queremos Movernos esperamos que no tengan la osadía de celebrar ningún acto para conmemorar este Día Internacional. Lo que tienen que hacer es, primero, atendernos y luego conmemorar”, concluye.