El actual contrato de limpieza en Santa Cruz no contenta a casi nadie: ni a gobierno municipal ni a vecinos. En las calles, en los medios y en el propio pleno del Ayuntamiento, el tema de la limpieza y recogida de basura cada vez es más frecuente.
“La ciudad huele mal” o “a Santa Cruz le falta un agüita” son frases que se escuchan con mayor frecuencia de un tiempo a esta parte, un asunto al que hace frente el concejal responsable de Servicios Municipales, Carlos Tarife, quien ha mostrado en reiterados momentos su descontento por un contrato que consensuó la exalcaldesa socialista Patricia Hernández en el año 2019 con la empresa Valoriza.
Falta agua
“El servicio de limpieza puede mejorar mucho”, comenta Tarife en declaraciones realizadas a RNE y recogidas por Atlántico Hoy. Ante la queja por la falta de “agua y escobillón” para baldear calles y aceras, menciona el concejal que los días de lluvia en Santa Cruz en este último año roza la cuarentena, “por lo que los tres zafarranchos semanales contemplados en el contrato firmado por la exalcaldesa son insuficientes”.
“Santa Cruz necesita más agua”, matiza, añadiendo que también hacen falta más barrenderos, “de los de la hoja de palmera que meten debajo de un coche y sacan toda la basura”.
Modificación
Teniendo en cuenta lo expresado, Tarife ha anunciado que están intentando aprobar una modificación del contrato para 2026 y 2027, con la idea de suscribir un nuevo contrato de limpieza para el 2028 y que contemple todas las necesidades del municipio, por lo que van a tener en cuenta la opinión de la ciudadanía santacrucera.
La nueva modificación contemplaría más cantidad de zafarranchos semanales, pasando de los 3 actuales a los 9 necesarios para abarcar a más barrios en menos tiempo. Por otro lado, también se trabaja desde la corporación local para implantar el contenedor marrón de tal manera que llegue a los cien mil ciudadanos del municipio.
Contenedor marrón
Explica el edil que al incorporarse el nuevo contenedor marrón en todos los distritos, el contenedor gris, “el que huele mal”, dejará de recibir productos orgánicos , disminuirá el mal olor y será mucho más efectivo el reciclaje.
Otro de los puntos a mejorar -y que reseña- es el referido a la conducta ciudadana. “No podemos normalizar que todavía existan 17 puntos negros en el municipio en los que los ciudadanos tiran todos los días basura de manera indiscriminada por fuera de los contenedores”, subraya.
2.500 euros de multa
Para evitar estas conductas incívicas, el Ayuntamiento ha acordado desplegar un operativo policial para sancionar “con multas desde los 2.500 euros, con lo que ya es verdad que la broma se tiene que acabar”.
Insiste el responsable de la Concejalía de Servicios Públicos en que las condiciones del contrato son insuficientes, pero es el que se ha firmado. “Ojalá pudiera, con una varita mágica, contratar lo que hace falta en Santa Cruz”, señala, apuntando que todas esas carencias estarán solventadas en el nuevo contrato.
Contrato vencido, sustituido
“Si Santa Cruz tuviera la posibilidad de tener en el actual contrato 40 barrenderos más, muchos de los debates que estamos teniendo no existirían. Pero la realidad es que con el contrato actual es imposible”, reitera.
En cualquier caso, teniendo en cuenta las deficiencias del servicio, el Ayuntamiento prevé no alargar un contrato vencido (diciembre de 2027) sino que ya trabaja en los pliegos del nuevo documento para tenerlo preparado y dispuesto para cuando llegue el momento de ponerlo en uso, a partir de 2028.