La insularidad y ultraperiferia de las Islas Canarias es motivo suficiente para que su mercado interior esté protegido por ley y esto, inevitablemente, genera un ecosistema propio de productos que, aunque el consumidor tenga completamente interiorizados, no existen o son difíciles de encontrar en el resto de España.
Hay de todo, desde comida hasta pegamentos. Uno no cae en la cuenta de esta peculiaridad hasta que llega de vacaciones a la Península, pide un mangopiña y se le quedan mirando como si les hubiesen hablado en arameo antiguo.
Refrescos
Ese refresco, el Nestea Mango-Piña, es uno de los ejemplos claros. En Canarias, es el Nestea que se sirve de forma estándar salvo especificación -quizás el consumidor prefiere de Maracuyá o de Limón-, pero en el resto del país es diferente. Empezando porque el Mango-Piña no existe allí y el de Maracuyá se encuentra en supermercados, pero no suele venderse en restaurantes y cafeterías.
Ocurre parecido con otros refrescos, como Clipper y Appletiser. Clipper en Canarias es un refresco que se consume desde 1956, pero en la Península, hasta hace muy muy poco, lo único que le venía a la mente a los consumidores era la marca de mecheros. En 2021, la cadena de supermercados Aldi comenzó a distribuirlo en sus centros peninsulares, pero todavía es muy poco conocida.
En el caso de Appletiser, su distribución en el mercado peninsular comenzó en 2017 y ya comienza a verse de forma más habitual en bares y restaurantes, pero el consumidor no lo tiene presente como ocurre en el Archipiélago.
La historia de Appletiser se remonta a 1966, cuando el empresario de origen francoitaliano Edmond Lombardi, inspirado por la belleza del magnífico Elgin Valley en Sudáfrica, comenzó a elaborar una bebida combinando el zumo natural de diez variedades de las doradas manzanas. Canarias fue el primer mercado europeo en el que la marca comenzó a probarse y, de hecho, ahora se produce en las Islas. Actualmente, es un producto de Coca-Cola.
Café Caracol
¿Quién no se ha tomado alguna vez una taza de Café Caracol? La marca tiene más de 70 años de antigüedad y presume de que "casi desde el comienzo se posicionó como marca líder del café en los hogares canarios". Sus elaborados proceden de Brasil y Colombia fundamentalmente, siendo el 90% de variedades arábigas y solamente el 10% de sus productos de la variedad robusta en tostados torrefactados.
Precisamente por eso, el café caracol sabe más suave para los peninsulares que lo prueban, ya que las variedades torrefactadas son muy populares en el resto de España. El inconfundible embalaje de Café Caracol sería reconocido por un canario en cualquier supermercado peninsular, pero lo más probable es que, si ocurre al revés, no sea así.
Bebidas alcohólicas
Otras bebidas, aunque alcohólicas, son muy consumidas en el Archipiélago pero apenas se conocen en el resto de España. Es el caso del ron Arehucas, que ostenta el título de ser la fábrica de ron más antigua de Europa. Se fundó en 1884 por el empresario de Alfonso Gourié Álvarez y se llamó originalmente Fábrica de San Pedro. Estaba destinada a la producción de azúcar. Aunque en algunos locales con gran variedad de bebidas en las grandes capitales españolas se puede encontrar, así como en superficies como Carrefour, lo cierto es que en la Península el consumo de ron está acaparado por marcas caribeñas como Barceló, Bacardy o Brugal.
En lo que se refiere a cerveza, Canarias quizás sea una de las pocas regiones donde el creciente imperio de Estrella Galicia no ha sobrepasado al de su producción local, salvando los feudos de Mahou en Madrid y Estrella Damm en Cataluña. Y es que las cervezas Dorada y Tropical, además de generar interminables discusiones estériles e insularistas en Canarias, son casi irrelevantes en el mercado peninsular en comparación con otras marcas.
Tabacos
Café, ron, cerveza... Son bebidas que a los fumadores suele gustarles acompañar de un cigarro. Pero ojo, porque si uno va de vacaciones o visita a la Península quizás no encuentre su marca faborita de tabaco. Es lo que ocurre con las canarias Coronas, Krüger y 1'69, tres marcas de producción local muy extendidas durante décadas en el Archipiélago pero que no se ven de forma nada habitual en el resto de España.
Al igual que ocurre con el ron, parece mentira que en un archipiélago donde la producción de caña de azúcar y tabaco ha sido durante siglos tan potente, el país al que pertenece no consuma sus productos. La última fábrica de cigarrillos de España está, precisamente, en Tenerife y es la que produce Coronas y Krüger, aunque en el resto del país es más conocida por producir Winston, Camel o Benson & Hedges.
En 2022, las marcas más vendidas en España fueron, por orden, Marlboro, Camel, Winston Classic, Chesterfield, Lucky Strike, Fortuna, Winston, West Brooklyn, L&M y Nobel, según datos de Statista.
Laboratorio de pruebas
Dejando a un lado los vicios, hay más productos en las Islas con circunstancias similares. Por ejemplo, Libby's, que hasta da nombre al equipo de voleibol de La Laguna, el Haris.
La empresa produce jugos y salsas y, aunque nació en Estados Unidos en 1869, determinados acuerdos comerciales resultaron en la prueba en Canarias de sus productos antes de su introducción en el mercado europeo, como ocurrió con Appletiser. La empresa que logró el acuerdo, y que aún lleva las riendas de la compañía, es Establecimientos Industriales Archipiélago.
Papas y galletas
Cuando se piensa en snaks en Canarias, a miles les viene a la cabeza Munchitos, una marca creada en el Archipiélago en 1967 de la mano de Ahemon (ahora Ahembo), firma canaria asociada a PepsiCo. En 1983, Aperitivos Snack se hizo con los derechos de fabricación de la marca, siempre asociado con PepsiCo, que sí produce en la Península otras marcas mucho más consumidas allí, como Lay's, Cheetos, Ruffles o Doritos.
Pero quizás uno de los productos más chocantes para un canario es Tirma. Estamos tan acostumbrados a recibir una Ambrosía al bajarnos del Binter que muchos no se han parado a pensar que es una ceremonia que sólo ocurre en Canarias. Pero que no cunda el pánico: sí se puede encontrar Tirma en la Península, ya que Aldi -de nuevo- comercializa allí sus productos. No obstante, el reconocimiento y cariño hacia la marca es infinitamente menor en el resto de España de lo que es en el Archipiélago.
Algo similar ocurre con los Cubanitos, de Galletas Bandama, empresa fundada en el año 1958 en Las Palmas de Gran Canaria con una producción muy similar a la de Tirma. Uno de sus clásicos es la galleta rosa Cubanito, aunque también producen Ambrosías muy reconocibles. Tanto en el caso de Tirma como de Bandama, el equivalente más reconocible en la Península son los Huesitos, una barrita de chocolate y barquillo muy popular creada en 1975 por Chocolates Hueso de Ateca y que hoy en día produce Chocolates Valor.
¿Kalise para todos?
¿Hay alguien en España que no recuerde a Andrés Iniesta diciendo: "Kalise para todos"? Probablemente no, si bien es cierto que la empresa heladera Kalise se fundó en Las Palmas de Gran Canaria en 1960 y tuvieron que pasar 50 años y un Mundial de fútbol de por medio hasta que el resto de España le pusiese cara a la mítica marca canaria.
A día de hoy, es muy probable, gracias a aquella espléndida campaña publicitaria, que cualquier persona en la Península sepa lo que es Kalise, pero no tanto que puedan encontrarse sus productos en bares y restaurantes con la facilidad que se encuentran en Canarias. Y, mucho menos, que el dueño del bar sepa que cuando le piden "un Trufo+" se están refiriendo a un polo.
Lo que La Gotita pega nada, nada lo despega
"Se me ha roto esto, mañana lo pego con La Gotita" es una frase que cualquiera entendería en el Archipiélago. Posiblemente más de uno respondiese a ella entonando la canción del mítico anuncio de 1991 en el que salían unos indios americanos cantando: "Lo que La Gotita pega nada, nada lo despega".
La Gotita es un pegamento producido desde hace décadas por la empresa argentina Akapol, fundada en 1960 y propietaria también de otras marcas como Poxipol. Akapol comercializa sus productos en España, pero en Canarias ha ocurrido con La Gotita el efecto Kleenex, que no es otra cosa que eso que pasa cuando de manera generalizada se empieza a llamar al producto por el nombre de la marca.
Es lo que pasa cuando decimos "Kleenex" y queremos decir pañuelos de papel, "queso Filadelfia" para queso de untar, "tipex" para corrector de bolígrafo o "pan Bimbo" para pan de molde. En Canarias, es muy habitual usar "La Gotita" para referirse a pegamento de contacto, pero en la Península no es tan común. Allí, está más generalizado otro efecto Kleenex: llamar al pegamento de contacto "Superglue" o "Loctite".
