Imagen de Aday Luis García Santana , entrenador personal y gerente de Libertad de Movimiento / AH
Imagen de Aday Luis García Santana , entrenador personal y gerente de Libertad de Movimiento / AH

Aday García, entrenador personal: "El fitness moderno puede generar más ansiedad que salud"

Aday García, entrenador personal en Gran Canaria, reflexiona sobre el deporte, los nuevos conceptos del fitness y las redes sociales como grandes difusoras de la actividad física en las nuevas generaciones

luna moya

Actualizada:

El 14 de marzo de 2020 se declaró el estado de alarma en España a causa del Covid-19. El 9 de mayo de 2021, más de un año después, se levantó oficialmente. Ese día, con la puerta entreabierta de una “nueva normalidad”, murió un virus y nació un nuevo estilo de vida: idolatrar el deporte.

Primero fueron los runners, los que salían a “despejarse” y descubrieron en el trote algo parecido a la libertad. Luego vino la secta del pádel, que llenó las pistas como si cada punto ganado pudiera borrar el encierro. Y más tarde, el CrossFit y los entrenamientos híbridos llegaron para coronar la fiebre del rendimiento: superarse, exigirse, medirse, exhibirse.

No hay que demonizar nada —mucho menos que el deporte sea, por fin, la adicción de las nuevas generaciones— , pero el problema surge cuando la búsqueda de salud se convierte en una nueva fuente de ansiedad

Aday Luis García Santana, entrenador personal y gerente de los gimnasios Libertad de Movimiento Salud y Rendimiento, en Gran Canaria, ha visto esa transformación de cerca. Atiende cada día a personas que quieren cuidarse, pero que muchas veces llegan agotadas, frustradas o perdidas entre métricas y comparaciones surrealistas. 

El fitness moderno

“El fitness moderno puede ser un arma de doble filo”, advierte. “El problema es que hemos olvidado las sensaciones naturales. No siempre hay que correr con reloj, no siempre hay que correr midiendo cosas. A veces, tanta comparación y tanta métrica nos desconecta del cuerpo y nos puede llevar a la ansiedad más que a la salud”.

Para Aday, la salud no se mide con dispositivos ni se construye en una hora de gimnasio. “La prioridad realmente es sentirte cómodo con tu cuerpo y poder lidiar con nuestra vida diaria. En lo único que hay que enfocarse es en tener actividad física, que no es lo mismo que el deporte”, explica. “La actividad física debe ser diaria, pero no tiene por qué ser extrema”.

Estar en forma

El entrenador defiende una visión mucho más amplia de lo que significa estar en forma. “Hay que moverse mucho, a baja intensidad, todos los días, y luego hacer algún entrenamiento programado si se lo puede permitir cada uno. Y sentirse bien consigo mismo”, resume.

Esa filosofía se apoya en lo más básico: la biología humana. “Nosotros somos seres locomotrices y si no cultivamos esa locomoción no vamos a estar bien ni físicamente ni psicológicamente”, señala. “Podemos cambiar de coche o mudarnos a otro sitio, pero la actividad física debe ser diaria. Ojo: la actividad física, no el entrenamiento programado para un deporte, que son cosas muy diferentes”.

García insiste en que moverse es una necesidad, no un castigo ni una moda. “Realizar actividad física no es para tener un cuerpo, es simplemente para estimular nuestra biología. Lo importante es convencerte de que somos locomoción pura: si quieres estar bien, tienes que moverte”, añade.

“Las redes sociales pueden motivar o paralizar”

Otro de los temas que Aday observa con preocupación es el impacto de las redes sociales en la relación con el deporte. “Depende de la situación personal de cada uno: puede hacerte tomar la iniciativa para empezar o puede hacerte pensar que no tienes lo que hay que tener y quedarte sin hacer nada, que es peor el remedio que la enfermedad”, reconoce.

El entrenador canario no rechaza la tecnología ni la exposición pública, pero defiende la moderación y la honestidad. “Antes poníamos vídeos de gente súper en forma haciendo cosas muy complejas, y eso generaba rechazo. Ahora cuidamos mucho más lo que mostramos, porque sabemos que puede inspirar, pero también intimidar”.

Sentido común

Lejos del discurso del esfuerzo constante o la autoexigencia, Aday García propone una vuelta al sentido común: disfrutar de moverse, escuchar al cuerpo y cuidar la mente. “Cada organismo es un mundo. Si anhelas llegar al cuerpo que ves en redes, primero tendrías que saber si hay ayudas externas y, sobre todo, si ese camino te haría sentirte pleno”, afirma.

Tal vez el secreto del nuevo concepto de deporte no esté en correr más rápido, levantar más peso ni medirlo todo. Quizá el verdadero reto sea aprender a moverse sin miedo, sin prisa y sin demostrarle nada a nadie, solo a uno mismo. Porque al final, el cuerpo no se entrena para ganar medallas, sino para poder seguir bailando la vida. Y, como dice Aday García, todo empieza con un paso: moverse