Una media de dos llamadas al día, o lo que es lo mismo, 739 menores de las Islas fueron atendidos en 2024 por la Fundación ANAR de Ayuda a Niños/as y Adolescentes en Riesgo. En total la fundación recibió 2.642 peticiones de ayuda en toda Canarias, con las ideas o el intento de suicidio y las autolesiones como principal problemas que afectan a los menores que acuden a la fundación.
El dato lo recoge el Informe Anual de las Líneas de Ayuda ANAR Canarias 2024 presentado este jueves. Este informe recoge los datos de las consultas recibidas a través del teléfono, el chat y el email de la fundación en Canarias. El teléfono de Ayuda a Niños/as y Adolescentes recibió 1.221 llamadas, mientras que el Teléfono de la Familia y los Centros Escolares atendió 557. En el caso de los niños desaparecidos recibieron 44 consultas, respecto al acoso fueron 370 llamadas y el chat/email recibió 450 peticiones de ayuda, según informan en un comunicado.
Consultas de menores
En total, de las 2.642 peticiones de ayuda, 1.119 requirieron una orientación especial desde el departamento psicológico, social y/o jurídico que, en la mayoría de las ocasiones, conllevan una derivación a un recurso externo, adecuado para cada caso concreto.
La salud mental ha sido el principal motivo de consulta de los menores (43,4%), donde destacan sustancialmente las ideaciones o intentos de suicidio (27,8%), además de los problemas psicológicos (7,6%) y las autolesiones (7,1%), recoge el comunicado.
Pero la violencia también es una de las principales consultas de los menores, cuyas consultas suponen el 42,9%, primando el maltrato físico (9,4%), seguido del maltrato psicológico (9%), las agresiones sexuales (6,6%), el acoso escolar o ciberbullying (6,1%) y la violencia de género (5,2%).
Consultas de adultos
Respecto a los adultos que acuden a la fundación por las situaciones que involucran a menores de edad, estas han estado sustentadas principalmente por situaciones de violencia con un 69,2% donde la problemática que predomina es el acoso escolar o ciberbullying (20,5%), seguida de la violencia de género (11,4%), el maltrato físico (11%), el maltrato psicológico (8,3%) y el abandono (7,6%).
Por su parte, el 15,1% de las llamadas de los adultos estaban relacionadas con la salud de los menores, entre los que cabe resaltar la conducta suicida, los problemas de conducta y los problemas psicológicos. Por otro lado, los problemas jurídicos y los problemas en el colegio también son recurrentes en el Teléfono de la Familia y los Centros Escolares, apunta el comunicado.
La urgencia de la llamada
Otro de los factores detectados por la fundación es la "elevada gravedad" de las peticiones recibidas. En el 87,6% de los casos de menores y en el 82,5% de los adultos han plasmado "un nivel de gravedad alto". Cifras similares a las urgencia de los casos.
En total, 7 de cada 10 consultas derivaron en orientación psicológica, jurídica o social. Esto se ha traducido en 3.858 derivaciones realizadas a organismos jurídicos y sociales. Además, los departamentos jurídico y social tuvieron que llevar a cabo 439 intervenciones, que se dan en aquellos casos en los que el riesgo para el menor de edad es extremo y donde tienen que intervenir las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, el Servicio de Emergencias 112, el Servicio de Protección de Menores, etc.
El prefil
De los menores que realizaron consultas en Canarias durante 2024, el 75% de las consultas fueron realizadas por adolescentes entre 14 y 17 años, siendo el rango de 16 a 17 años el más numeroso (43,9%). Por otro lado, el grupo de 0 a 9 años representa el 39,9% de las consultas realizadas por adultos.
En cuanto al género, en las consultas realizadas por niños y adolescentes, el 72,6% fueron mujeres menores de edad, mientras que en la Línea de Ayuda de la Familia y los Centros Escolares, donde también fueron superiores las relacionadas con mujeres, se igualan más los porcentajes, con un 55,4% y 44,6% mujeres y varones, respectivamente.
