Cuatro elementos patrimoniales de Canarias están en riesgo de desaparición

Se encuentran en la lista roja de la asociación Hispania Nostra por encontrarse abandonados, arruinados y sin ningún mantenimiento

Guardar

Estos son los elementos patrimoniales que están en riesgo de desaparecer / MONTAJE AH - HISPANIA NOSTRA
Estos son los elementos patrimoniales que están en riesgo de desaparecer / MONTAJE AH - HISPANIA NOSTRA

Una hacienda, un molino, un teatro-cine y un barco son los cuatro elementos patrimoniales de Canarias —tres en tenerife y uno en Fuerteventura— que han sido incluidos en la lista roja que elabora la asociación Hispania Nostra por encontrarse "abandonados, arruinados y sin ningún mantenimiento".

Este listado recoge más de 1.200 monumentos españoles que se encuentran sometidos a riesgo de desaparición, destrucción o alteración esencial de sus valores, y a ella se han incorporado la Hacienda de San Clemente en Santa Úrsula y el molino de La Piñera y el teatro-cine Viera y Clavijo, ambos en Los Realejos. A ellos se suma el pailebote 'Nostramo' o 'Conquistador Pirata', un barco de 36 metros de eslora del que sólo quedan cuatro originales en España, uno de ellos en el Museo Marítimo de Barcelona, los otros dos en manos privadas y este último fue recientemente embargado por Puertos Canarios, que lo destinó al desguace en el puerto de Gran Tarajal, en Fuerteventura.

Historia que desaparece

Este barco mercante se construyó en Barcelona en 1918 y se dedicó principalmente al transporte marítimo de personas y mercancías en el tráfico marítimo del cabotaje, según ha explicado la asociación Hispania Nostra este jueves en un comunicado. Después de un periodo de corta vida como yate privado, la embarcación recaló en Tenerife para realizar excursiones turísticas con los nombres de 'Nostramo' y 'Conquistador Pirata' pero, tras el fallecimiento de su último propietario mientras el barco se encontraba en Gran Tarajal, la administración del puerto lo declaró en estado de abandono para iniciar el proceso de desguace.

En cuanto al patrimonio en riesgo en Tenerife, la asociación Hispania Nostra señala que la Hacienda de San Clemente, en Santa Úrsula es un conjunto agropecuario y residencial levantado en el siglo XVI por la familia Grimón, y se constituye como una de las haciendas vinícolas más singulares de la comarca. Aunque en 2015, la Fundación Telesforo Bravo-Juan Coello y el Ayuntamiento idearon un proyecto para convertir la hacienda en centro de visitantes de la naturaleza, este no llegó a materializarse.

Abandono

El conjunto presenta diferentes grados de conservación derivados de su condición de abandono, cuenta con numerosos deterioros en la fachada, desprendimiento del enlucido en puntos concretos y de parte de las barandillas de la azotea de los ventanales. Además, están en riesgo las tejas de la cubierta del edificio principal, entre las que está creciendo vegetación que puede derivar en el debilitamiento de su consolidación.

En cuanto al molino de La Piñera en Los Realejos, fue fundado en 1922 por Daniel Pérez Cabrera, con la ayuda de sus vecinos, para la molienda de grano y la producción de gofio, que se realizaba aprovechando la fuerza del agua proveniente de una galería cercana y estuvo activo hasta 1970, empleándose durante el día a la elaboración de gofio y por las noches a abastecer el Realejo Alto de electricidad. Su estado de conservación es deficiente, se encuentra en proceso de ruina, hay pérdidas de numerosas tejas en la cubierta, derrumbamiento de parte de uno de los muros exteriores y deterioro generalizado del interior, señala Hispania Nostra, que aprecia además la pérdida del recubrimiento de las paredes, oxidación de los materiales metálicos que están, a su vez, rotos y desprendidos, crecimiento de vegetación y restos de escombros y desperdicios.

Riesgo

También en Los Realejos se sitúa el Teatro-Cine Viera y Clavijo, un inmueble que se levanta en un solar de casi 850 metros cuadrados erigido en 1947 sobre un proyecto del arquitecto José Enrique Marrero Regalado, responsable, entre otras obras, de la Basílica de la Candelaria y de la sede del Cabildo de Tenerife.

Es uno de los más notables representantes del denominado estilo neocanario, propio de la arquitectura imperante en la época pero en los años 70 del siglo XX sufrió una serie de reformas interiores que transformaron su aspecto inicial. El estado actual del cine es bastante preocupante y se encuentra en un avanzado estado de deterioro "debido al abandono por parte de sus propietarios y la pasividad del Ayuntamiento de dicha localidad", según afirma Hispania Nostra.