El Puerto de Las Palmas fue escenario este fin de semana de la llegada de dos polizones procedentes del buque MSC Alicante, que atracó en la terminal de OPCSA el sábado. El incidente se produjo a las 19.35 horas del sábado, cuando los hombres se lanzaron al mar y alcanzaron tierra utilizando unas escaleras.
La alerta fue dada por un testigo, quien informó inmediatamente a la Policía Portuaria. Los individuos fueron detectados poco tiempo después de que el buque atracara y se activaron los protocolos de seguridad.
Golfo de Guinea
Tras las correspondientes gestiones con la Guardia Civil y las autoridades portuarias, los dos polizones fueron identificados. Según se ha confirmado, el MSC Alicante había cruzado el Golfo de Guinea y provenía del puerto de Abidján, en Costa de Marfil. El barco, con bandera maltesa, tiene como destino final Marsella (Francia).
Los polizones fueron devueltos al MSC Alicante porque —pese a que la Ley General de Navegación Marítima (Ley 14/2014) establece que la responsabilidad inicial recae en la Autoridad Portuaria— la normativa fija que si se confirma que los polizones proceden del buque, las autoridades portuarias tienen la potestad de ordenar su devolución al barco.
Derechos fundamentales
Este procedimiento se lleva a cabo siempre que no vulnere derechos fundamentales ni tratados internacionales de protección a personas migrantes, como los relativos al asilo o a la prohibición de devolver a personas a situaciones de riesgo.
Aunque los individuos ya no estén físicamente en el barco, la disposición dictamina que el capitán sigue siendo responsable de informar sobre cualquier incidente relacionado con su embarcación.
La regla también estipula que, en todos los casos, debe garantizarse la atención humanitaria básica de los polizones, como acceso a agua, alimentos y asistencia médica, en línea con las normativas internacionales de la Organización Marítima Internacional (OMI).
