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El consejero de Educación, Poli Suárez / EFE

Educación, atada de pies y manos ante el problema de la vivienda en Lanzarote y Fuerteventura

Muchos docentes evitan ambas islas ante la dificultad para encontrar un alquiler asequible durante el tiempo que deban estar allí asentados

La Consejería de Educación del Gobierno de Canarias asegura que le resulta imposible ayudar a los profesores que evitan trabajar en Lanzarote y Fuerteventura ante el problema de la vivienda. Todo parte de que el portavoz del sindicato STEC-IC, Gerardo Rodríguez, explicó esta semana en declaraciones a Atlántico Hoy que muchos docentes evitan ser destinados tanto a ambas islas porque acceder a un alquiler asequible es muy difícil.

Somos conscientes, pero no podemos hacer nada al respecto”, afirman desde el área dirigida por Poli Suárez en el Ejecutivo regional. La crisis habitacional afecta a los maestros del Archipiélago hasta el punto de no elegir ciertos lugares para desempeñar su labor con el objetivo de esquivar caer en pérdidas tras el pago del arrendamiento cada mes. Se trata de una realidad que se da también en la zona sur de Gran Canaria y Tenerife.

Insularizarse

A pesar de todo, la Consejería de Educación asegura que está atada de pies y manos. Las fuentes consultadas por este periódico ponen sobre la mesa que responde a una situación del mercado de vivienda tanto en Canarias como en España y “afecta al conjunto de la ciudadanía”. Los profesores tienen la posibilidad de insularizarse y negarse a dar clase en ciertas islas, pero no pueden hacer lo mismo para descartar municipios. 

Los docentes se quejan también de que su salario no es suficiente porque los complementos que reciben por parte del Gobierno autonómico llevan congelados desde el año 2018. Se trata de añadidos que paga el Gobierno autonómico en concepto de tutorías, jefaturas de departamento, coordinaciones, riesgos laborales o convivencia. Todo unido, dicen desde STEC-IC, a que los profesores han perdido mucho poder adquisitivo.

Imagen de un profesor en un aula / EFE

"Sitios muy tensionados"

“El profesorado tiene que moverse y va a sitios muy tensionados”, apuntaba Rodríguez. “Deben alquilar”, decía, “en unas condiciones que estén a su alcance relativamente”. “No encuentran vivienda, los precios se han vuelto desorbitados”, exclamaba. Un estudio elaborado por el sindicato hace un tiempo reveló que, tras terminar de llevarlo a cabo, solo había 17 casas destinadas para régimen residencial.

Desde la Consejería resaltan que, en el caso de los docentes, cobran una retribución de residencia más elevada que en las islas capitalinas —en relación a los que trabajan en La Graciosa, Lanzarote, Fuerteventura, La Palma, La Gomera o El Hierro—.

Sustituciones

El portavoz de STEC sostenía que los profesores interinos evitan elegir Lanzarote para hacer sustituciones dado que, en muchos casos, no les conviene estar allí 15 días “porque van a tener más gastos que ingresos”. “Ahí también se encuentra perjudicada toda la comunidad educativa como los alumnos y sus familias”, apostillaba.

En cuanto a los municipios tensionados —que no se pueden evitar por parte de los docentes—, forman parte de la lista Arona, Adeje, Granadilla o San Miguel. Las alternativas que les quedan a los profesores canarios pueden ser, por ejemplo, el Valle de San Lorenzo o San Isidro. Un problema añadido es coger el coche para desplazarse y sufrir los atascos que se dan en las carreteras tinerfeñas.