El Obispado ha anunciado el nombre del nuevo obispo de La Laguna, que ocupará el puesto dejado por Bernardo Álvarez Afonso tras su renuncia en septiembre del año pasado. Será el sacerdote Eloy Alberto Santiago Santiago, que actualmente es Secretario General - Canciller y vicario episcopal de Economía y Patrimonio de la diócesis de Canarias.
El Papa Francisco elige al obismo de entre tres candidatos. El aún “obispo electo”, nació en Las Palmas, tiene 52 años y lleva fue ordenado sacerdote en 1999. En 2006 entró en el servicio diplomático del Vaticano y estuvo destinado en las Nunciaturas apostólicas de Colombia, África Meridional y Gran Bretaña. Desde enero de 2022, es párroco de la Ascensión del Señor, la Asunción de María y Jesús de Nazaret, en Las Palmas de Gran Canaria.

Migración
“Habla varios idiomas y tiene un bagaje intelectual y pastoral rico y beneficioso para todos nosotros”, dijo en rueda de prensa Antonio Manuel Pérez Morales, que ha administrado la diócesis desde otoño, función que “continuará desempeñando esta labor hasta que tome posesión el nuevo obispo”, el próximo 1 de mayo.
La diócesis Nivariense, que abarca a las islas occidentales, enfrenta varias “singularidades”, dijo Pérez Morales: “El drama migratorio, el crecimiento demográfico y la disminución de las vocaciones pastorales". El actual administrador apostólico se encontraba también en la terna para la elección en el Vaticano.
Polemicas
El cambio de obispo llega después de que Bernardo Álvarez Afonso protagonizara varias polémicas durante su mandato. En 2022 tuvo que declarar ante las Fiscalía por un presunto delito de odio: en unas declaraciones, calificó la homosexualidad como "pecado mortal", aunque las diligencias fueron archivadas.
Pero su salida de tono más sonada fueron las declaraciones en referencia a los abusos a menores que hizo en 2007: "Puede haber menores que sí lo consientan y, de hecho, los hay. Hay adolescentes de 13 años que son menores y están perfectamente de acuerdo y, además, deseándolo. Incluso si te descuidas te provocan", dijo en el desaparecido diario La Opinión.
En mayo del año pasado, grupos de víctimas de abuso pidieron su dimisión por haber permitido que el sacerdote de Tejina, denunciado por pederastia y pedofilia en 2004, siguiera ejerciendo "y gozando de protección e impunidad". E este sentido , el diario El País lo incluyó entre 39 prelados españoles sospechosos de silenciar y ocultar casos de curas pederastas en la Iglesia.
Su renuncia finalmente tuvo que ver con que un diagnóstico de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), meses antes de la "jubilación" prevista, a los 75 años.
