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Sociedad

Un empresario de hostelería y actual arrendatario del Edison, a juicio por tráfico de cocaína

El fiscal acusa a siete de hombres de tratar de introducir cocaína en Gran Canaria a bordo de un velero

4 minutos

Narcolancha interceptada con cuatro toneladas de cocaína al sur de Canarias / POLICÍA NACIONAL

El próximo martes se juzgará en la Audiencia Provincial de Las Palmas a siete hombres acusados de un delito contra la salud pública. Los presuntos narcos intentaron importar cocaína desde la isla caribeña de Curazao hasta Las Palmas de Gran Canaria a bordo de un velero. El empresario y arredantario de los locales de moda las cervecerías Edison y Mc Gregor y exadministrador del restaurante del Real Club Náutico de Gran Canaria (RCNGC), Francisco M.G., conocido como Paco, se sentará en el banquillo de los acusados. Paco es el administrador único de la empresa Botánico Gourmet Experience ubicada en la capital grancanaria, que gestiona los locales mencionados anteriormente y que hasta el mes de noviembre de 2022, también regentaba el restaurante Gallo Negro Triana. El fiscal lo acusa de participar en la financiación de la operación.

“Los acusados Francisco M.G., José M.M.A., Jose L.A.M., Francisco S.R., Alain M.E., Iker S.A. y Juan C.R., todos ellos, puestos de común acuerdo y con total desprecio por la salud pública realizaron actividades de transporte de sustancia estupefaciente para su traslado desde una isla del Caribe, llamada Curazao, hasta el Puerto de Las Palmas de Gran Canaria”, relata el fiscal en su escrito de acusación.

Detectores de metales y contravigilancia

Los hechos denunciados se remontan a los meses de noviembre y diciembre del año 2015. Según el Ministerio Fiscal, José M.M.A. y Paco tenían la misión de dar cobertura económica a la operación, así como la de adoptar las decisiones convenientes a la finalidad que buscaban, que era recibir la sustancia estupefaciente para proceder a su venta posterior.

“José M.M.A., se encargó personalmente de hacerse con detectores de metales para realizar actividades de contravigilancia para detectar la presencia de posibles GPS policiales, y es él quien contacta con Iker S., con José L.A.M.y con Juan C.R.N., quienes se encargaron de la conducción del velero. En el caso de Iker y Juan Carlos, patroneando el velero y en el caso de José Luis dando asistencia y consejos técnicos para facilitar que la sustancia estupefaciente no fuera interceptada por las autoridades policiales”, reza el escrito del fiscal.

Paco ayudaba en la contratación

José M.M.A., también es presuntamente la persona, que se encargó de realizar el pago de todos los gastos que se fueron ocasionando como reparaciones, la compra de billetes, la compra de terminales móviles y del pago a las personas que con él colaboraban. Según el escrito de la fiscal, Iker S. se encargó de la logística de las comunicaciones y los teléfonos móviles para que todas las personas implicadas pudieran estar en contacto. También se encargó de buscar personas que pudieran colaborar, facilitando sus nombres a José M., encargado último, junto con Paco, de la contratación. 

“De esta forma, se hicieron con una embarcación, de nombre Whatever, que pusieron a nombre de Juan C.R. y que Iker S. junto con Alain M. trasladaron desde Las Palmas al Caribe, para una vez allí, cargarla con cocaína, siendo posteriormente Juan C., quien la conduciría de vuelta a Las Palmas”, continúa el escrito de acusación.

Abordaje del velero el alta mar

El día 9 de diciembre de 2015, se produjo el abordaje de la embarcación Whatever en un punto del Océano Atlántico. A bordo se encontraron 95 kilogramos de cocaína con una riqueza media del 68,93% y un kilogramo de cocaína con una riqueza media de 68,51%, que estaban ocultos en el interior de unas bombonas de gas y de una batería de la embarcación. Las autoridades calcularon que la sustancia hubiera tenido en el mercado negro un valor de unos 3.283.872 euros. 

El velero estaba patroneado por Iker y Alain y tenía previsto arribar a Gran Canaria desde Curazao, pasando por la isla de Martinica y San Martín, bajo la dirección de José L.A.M.. “El acusado Alain M.E.fue la persona encargada de realizar todas las tareas de reparación mecánica del velero Whatever, mientras que Francisco S.R. fue la persona que se encargó de realizar los cambios físicos que necesitaba el velero para poder hacer sitio a la droga que iba a ser transportada, realizando modificaciones eléctricas de forma que el barco pudiera navegar con una sola batería y el hueco de las otras pudieran contener la droga incautada”, detalla el fiscal.

Incautación de dinero

En el registro del domicilio de Francisco S.R., se encontraron 2.360 euros provenientes de la realización de estas actividades ilícitas y dos trozos de resina de cannabis, uno de 33,09 gramos y otro de 3,02 gramos. A Paco le fue incautado un vehículo Mercedes CLA 200 y un turismo modelo Opel Astra, que había obtenido con la realización de estas actividades ilícitas, así como la cantidad de 75.600 euros que guardaba en el domicilio de sus padres. A Juan C.R. le fue incautado el velero Whatever y a José M.M.A. le fue incautado una motocicleta marca BMW modelo C-600, un vehículo marca Mercedes clase B, un turismo BMW, modelo 420-D así como un turismo marca Renault, Modelo Scenic.

El fiscal solicita imponer para cada uno de los acusados una pena de nueve años de prisión y una multa de 6.000.000 euros. Además se interesa el decomiso de la sustancia estupefaciente, el dinero y los objetos interceptados, incluidos los vehículos.

Nota aclaratoria: Atlántico Hoy quiere dejar constancia expresa que los locales, marca y nombre Edison y McGregor no pertenecen a D. Francisco M.G., el cual solo ostenta la condición de arrendatario. Su presunta actividad ilícita no guarda relación alguna con la empresa propietaria y arrendadora de los locales, marca y nombre comercial citados en este artículo.