A veces, la música tiene el poder de borrar océanos. Y eso fue exactamente lo que sintió el cantante puertorriqueño Edwin Rivera durante una de las celebraciones más queridas del Archipiélago: la romería de Tegueste.

En el podcast Musicafé (@musicafe.podcast), el artista compartió una anécdota que lo dejó marcado y que, según confiesa, le hizo sentir como si hubiera regresado a su tierra natal sin salir de Canarias.

Un eco caribeño en Tegueste

Rivera recuerda el momento con emoción. “Estaba en la romería de Tegueste, la mejor de Canarias”, asegura entre risas y admiración. Lo que parecía una simple jornada festiva se convirtió en un encuentro inesperado con sus raíces musicales. Entre el bullicio, los bailes y el sonido de las chácaras, el cantante escuchó un ritmo que le resultaba familiar, casi entrañable.

“Escuchaba cómo un canario cantaba una canción, un ritmo de Puerto Rico, de mi tierra”, relata. La sorpresa fue inmediata. Durante unos segundos, Edwin Rivera creyó que la música lo había transportado de vuelta a su isla. “Estoy en Puerto Rico, en Puerto Rico”, exclamó con asombro mientras buscaba el origen de aquel sonido que parecía desafiar la distancia.

@musicafe.podcast Unos amigos están en Tegueste, en una de las mejores romerías de Canarias. Alguien está escuchando a un canario cantar una canción con ritmo de Puerto Rico. ¡Qué momento! #Tegueste #romerías #Canarias #PuertoRico #Aday #Yeray ♬ sonido original - musicafe.podcast

El encuentro con Yeray

Siguiendo el compás, Rivera se abrió paso entre el gentío hasta dar con el responsable de aquel canto. No era un compatriota suyo, sino un artista canario: Yeray de Punto Cubano, conocido por fusionar los sonidos tradicionales del Archipiélago con influencias caribeñas y latinoamericanas.

Fue entonces cuando el cantante de salsa comprendió que la conexión entre Canarias y el Caribe no es solo histórica, sino también musical. Dos orillas unidas por siglos de intercambio cultural, por melodías que viajan en los barcos y por voces que conservan los ecos de un pasado compartido.

La romería más especial

Desde aquel día, Edwin Rivera no duda en afirmar que la romería de Tegueste ocupa un lugar especial en su corazón. No solo por su colorido y su ambiente festivo, sino por la emoción de sentirse parte de algo más grande: una comunidad unida por la música y las raíces.

Esa fusión espontánea entre un canto canario y un ritmo puertorriqueño resumió para él lo que tantas veces ha intentado transmitir con su arte: que la música, cuando nace del alma, no entiende de fronteras.