Un cliente compra medicamentos en una farmacia / Archivo
Un cliente compra medicamentos en una farmacia / Archivo

Los farmacéuticos canarios alertan: “Hay pacientes que dejan sus medicamentos sin avisar al médico"

La automedicación en las Islas se ha reducido, según el Colegio de Farmacéuticos de Las Palmas; sin embargo, el foco está ahora en quienes deciden abandonar sus tratamientos sin informar a su médico

ariadna

La automedicación en Canarias ha experimentado un descenso, en parte gracias a un mayor control sanitario y a la concienciación ciudadana sobre el uso responsable de los medicamentos, según afirma Loreto Gómez, presidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Las Palmas (COF). 

No obstante, superada un poco la preocupación sobre la automedicación entre la población del Archipiélago, los farmacéuticos ponen el foco ahora en la decisión de la ciudadanía de saltarse o modificar sus tratamientos, es decir, de “autodesmedicarse”. 

Automedicación

Las Islas destacaban en 2022 por ser una de las comunidades con mayor porcentaje de automedicación entre la población — un 35,3% de los encuestados, muy por encima de la media nacional (26%) —, según el 'V Estudio de Salud y Estilo de Vida' de Aegon. 

A día de hoy, desde el sector farmacéutico, aseguran que esta tendencia se está reduciendo. “La automedicación cada vez está siendo menor porque los medicamentos van sujetos a recetas médicas y en las farmacias pedimos esas recetas”, explica Gómez, subrayando que la mayor parte de los tratamientos farmacológicos requieren hoy en día la supervisión directa de un profesional médico.

Dejar sus tratamientos

Aunque la automedicación ha disminuido, ha surgido otro fenómeno preocupante: la autodesmedicación. Los pacientes interrumpen o modifican su tratamiento médico sin consultar previamente con un profesional sanitario. 

Como farmacéutica en un barrio de Las Palmas de Gran Canaria, Gómez lo ve desde su propia experiencia: “Hay personas que deciden por su cuenta dejar de tomar un medicamento porque dicen que les sienta mal, pero no informan al médico. Y ese profesional sigue creyendo que el tratamiento se está siguiendo como debe”.

Uno de los mayores problemas que presenta esta práctica es que puede comprometer la efectividad del tratamiento y derivar en complicaciones de salud, hospitalizaciones o incluso ingresos en urgencias, al igual que ocurre con el caso contrario de la automedicación, añade Gómez. 

“Al pie de la letra”

La presidenta del COF entiende que estas decisiones por parte de la población canaria pueden deberse al colapso del sistema de salud y las demoras en las citas médicas, que “no las dan de un día para otro” y “el médico no tiene el tiempo suficiente para atender a un paciente”. 

A pesar de ello, Gómez recuerda que es vital que el paciente siga “al pie de la letra” las indicaciones del equipo sanitario —médicos, enfermeros y farmacéuticos— y “no busque tomar o quitar un medicamento por su cuenta”. 

Sistemas personalizados

Uno de los principales retos, sobre todo con la población mayor, es evitar errores en la toma de medicación. “Muchos de nuestros mayores están polimedicados y no siempre tienen claro qué tomar y cuándo hacerlo”, indica. 

Para hacer frente a esta situación, las farmacias ofrecen Sistemas Personalizados de Dosificación (SPD), que organizan la medicación semanal del paciente de forma visual y clara. “Estos sistemas ayudan a evitar duplicidades o olvidos y son especialmente útiles cuando hay varios cuidadores en un mismo domicilio”, explica.