Medio Ambiente no ve argumentos para negar la autorización a la granja de pulpos de Pescanova

Más de un centenar de organizaciones enviaron un informe que relataba incongruencias en el proyecto de la primera granja comercial de pulpos, pero el Gobierno no ve razones para denegar la autorización de vertidos

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Medio Ambiente no ve argumentos para negar la autorización a la granja de pulpos de Pescanova. Unsplash
Medio Ambiente no ve argumentos para negar la autorización a la granja de pulpos de Pescanova. Unsplash

El partido animalista Pacma ha recibido una respuesta de la Dirección General de Lucha Contra el Cambio Climático y Medio Ambiente en la que indican que "no existen argumentos para denegar la autorización de vertidos desde tierra al mar" de la granja que la empresa Nueva Pescanova quiere abrir en Gran Canaria. El partido ve incronguencias en la que sería la primera granja de pulpos comercial del mundo y que defienden que podrá afectar gravemente al ecosistema marino canario. 

La respuesta del Gobierno viene tras las alegaciones del partido "por la incalculable cantidad de desechos que generará la futura granja de pulpos que prevé ubicarse en la isla de Gran Canaria". Pacma entregó en mayo un documento firmado por 110 organizaciones vinculadas al movimiento animalista que pedía al Ejecutivo autonómico que considerada su postura sobre permitir a Nueva Pescanova desarrollar una piscifactoría para criar pulpos en cautividad. La compañía prevé contar con unas instalaciones de 52.000 metros cuadrados en el Puerto de Las Palmas para la producción de unas 3.000 toneladas de pulpo al año a partir de 2023.

Daños al ecosistema

Las quejas sobre el proyecto se relacionan con las consecuencias que puede tener sobre el ecosistema marino canario esta granja. El dossier avisaba de que se podrían propagar patógenos y enfermedades desconocidas y criticaba la falta de información sobre estrategias de prevención y riesgos. Pero la respuesta del Gobierno de Canarias a este documento ha sido "desconcertante" para el partido, que destaca que también es "en términos jurídicos incongruente" porque "no hay correspondencia entre lo alegado y lo resuelto. Se limita a referencias genéricas y a decir que las alegaciones que se han formulado no tienen relación con los vertidos".

Pese a que la resolución indica que la autorización de vertidos está en suspenso por falta del preceptivo informe de compatibilidad con la demarcación marina canaria, Pacma considera que "sería sorprendente que finalmente este fuera desfavorable y no se autorizara el vertido". El rechazo desde el partido se formuló durante procedimiento de autorización de vertidos de tierra al mar, que es donde ha habido trámite de exposición pública, ya que este permiso contempla la autorización a la empresa de poder verter residuos "de manera controlada”, ha añadido.

Vertidos al mar

Si bien la abogada colaboradora de PACMA, Marta Muntada, ha explicado que este proyecto de acuicultura "debe de contar, al menos, con tres autorizaciones del gobierno canario: licencia de impacto ambiental; autorización de vertidos de tierra al mar y concesión de dominio público portuario".
Sin embargo, el partido defiende que "se desconoce absolutamente el impacto que puede tener el vertido ya que la propuesta de Nueva Pescanova no valora a fondo las consecuencias y sus riesgos, lo que ya sería motivo suficiente para denegar la autorización". Y avisa de que "una vez en funcionamiento las consecuencias serían muy difíciles de revertir", añaden.

"Cuando decimos daños irreparables nos referimos a la destrucción del litoral, su fauna y vegetación, causando perjuicios en otros sectores tan importantes para Canarias como el turismo, la pesca, el medio ambiente y potencialmente a la salud humana, fauna y flora marina y el bienestar animal", añaden. En la resolución tampoco se señala en relación al impacto de vertidos en las zonas especialmente protegidas en Canarias y que, según PACMA, "estaría totalmente prohibido". 

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