El malestar hasta ahora estaba oculto, pero con la llegada de septiembre y con la falta de respuesta y de tiempo el sector social del Archipiélago ha estallado. La no adjudicación de los fondos para luchar contra la violencia de género por parte del Instituto Canario de Igualdad (ICI) ha generado una oleada de cancelaciones de los proyectos que se desarrollan en las islas para sensibilizar y prevenir la violencia de género.
En las últimas horas varios proyectos centrados en la sensibilización contra la violencia de género -alguno incluso premiado- han anunciado que este año no podrán ejecutarse ya que el ICI todavía no ha repartido los fondos asignados por el Pacto de Estado contra la Violencia de Género. Esta cuantía asciende hasta los 10.363.552 euros, que de momento no se han adjudicado.
Una ola de indignación
Esta paralización ha generado indignación entre los promotores de los proyectos, que ya han anunciado su cancelación por el poco margen para su celebración, ya que los fondos tienen que justificarse antes del 31 de diciembre. Jornadas de prevención, talleres de sensibilización, eventos e incluso investigaciones son algunos de los proyectos que ya han anunciado que este año no podrán desarrollarse.
Lo han anunciado después de que el ICI haya informado esta semana que todavía está estudiando los proyectos que se presentaron a principio de año. Esta semana, la consejera de Bienestar Social, Candelaria Delgado, aseguró que su área estaba desarrollando un trabajo de “revisión y control exhaustivo” de los proyectos presentados porque “de nada sirve convocar subvenciones que después acaben devolviéndose por no estar bien justificadas”.

Sin respuesta
Estas palabras han sido recogidas con escepticismo entre quienes desarrollan estos proyectos. Fuentes del sector -que prefieren no publicar sus nombres- explican que a lo largo del año el ICI cambió los criterios de los proyectos, indicando que tenían que hacer de nuevo las fichas específicas para recibir los fondos. Esto sucedió el 2 de julio. Desde entonces, apuntan, se están revisando los proyectos, lo que “es una forma bonita de negarte el presupuesto”, debido al poco margen para ejecutar los proyectos.
Toda esta situación está generando desasosiego entre los profesionales que han presentado estos proyectos ya que al quedarse sin financiación hay empleos que también se han quedado en el aire, pese a haber dedicado tiempo en presentar las iniciativas. “Estamos en la nada absoluta”, valoran estas fuentes.
Investigacion sin financiación
Entre esas personas que han anunciado la imposibilidad por poner en marcha sus iniciativas contra la violencia de género está la investigadora Nira Santana. Santana presentó una investigación donde busca profundizar en el acoso a las mujeres que juegan a videojuegos, una temática en la que ella está investigando desde 2020.
“Los datos son escalofriantes, las chicas que juegan sufren insultos, amenazas y discriminación con frases del tipo ‘vete a fregar’, ‘vete a cocinar’, ‘este no es tu lugar’, ‘vamos a perder la partida’, ‘vamos a por ella que seguro que no se entera”, explica sobre el gérmen de su investigación.
Un lugar hostil
“Esto tiene unas consecuencias y es que muchas chicas, y de ahí mi investigación, empiezan a entender el mundo de los videojuegos desde muy pequeñas como un mundo hostil”. “Todo esto las hace estar obligadas a estar bajo un nombre masculino o usar distorsionadores de voz para poder jugar”, apunta sobre este tipo de violencia.
Según explica, estas situaciones forman parte de las ciberviolencias digitales y su hipótesis es que toda esta hostilidad percibida por mujeres provoca que “no valoren la posibilidad de formarse y de trabajar en la industria”. Su deseo es poder desarrollar toda la investigación en Canarias para poder demostrar su hipótesis, pero el problema, explica, es que ya hay poco margen para la ejecución de la investigación.
Sin margen
Por eso apunta que a estas alturas de septiembre y sin una respuesta por parte del Instituto Canario de Igualdad, “como investigadora no tengo margen de maniobra de presentar algo serio de aquí a diciembre”. Pero no solo eso, también explica que no puede “comprometer” su salud para “desarrollar un proyecto en tiempo récord que tenga un impacto y una dimensión a la altura de lo que merecen las mujeres en Canarias”.
Desde su punto de vista, la no ejecución hasta ahora de los fondos no les está “facilitando” hacer “un trabajo serio, con rigor y con el tiempo necesario para poder verdaderamente cambiar las cosas”. “El ICI tiene que investigar lo que pasa, porque si no diagnosticamos, ¿qué soluciones vamos a aportar si no conocemos las problemáticas actuales?”, se pregunta Santana, quien sentencia que “cuando se cierran las puertas a la investigación, se cierran las puertas al diagnóstico”.
¿Herencia?
En su argumentario, esta semana la Consejería de Bienestar Social ha insistido en que esta situación viene causada por la “herencia” del anterior Ejecutivo canario (Pacto de las flores), lo que ha sido visto con escepticismo en el sector social por haber pasado ya dos años de legislatura. A esto se suma el baile de cifras que se ha dado por la no ejecución de los fondos en el anterior mandato, que primero se cifró en 15 millones y luego en 17 millones.
Ante las críticas la consejería aseguró que había puesto en marcha medidas para que la no ejecución de los fondos “no vuelva a ocurrir”. Esas medidas son: nuevas instrucciones claras para quienes gestionan proyectos, con un documento de "condiciones de ejecución y justificación"; trabajo directo con el Ministerio, con reuniones frecuentes para resolver dudas desde el inicio; proyectos revisados uno a uno, evitando actividades que no sean realmente de lucha contra la violencia de género y la creación de una rúbrica de valoración, según informaron.
Entre las iniciativas que han anunciado su cancelación está el Proyecto Sin Filtros, las Jornadas de Comunicación Igualitaria, el evento Las chicas también juegan, las jornadas Por no hablar, el proyecto ConectaConsexus o el proyecto Sexplotación entre otras. Todas ellas pertenecen al programa Aliadas de la Dirección General de Juventud.