El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha compartido en su cuenta de X unas últimas palabras dedicadas al Francisco Sánchez, fundador del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), así como de dos de los mejores observatorios del mundo: el Observatorio del Teide, en Tenerife, y el Observatorio de Roque de los Muchachos, en La Palma, fallecido el martes en Madrid a los 89 años de edad.
Decimos adiós a Francisco Sánchez, pionero de la astrofísica española.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) October 22, 2025
Convirtió los cielos de Canarias en un balcón único para descubrir estrellas.
Nos deja en herencia los cielos de esas islas que tanto amó: el mejor lugar de la Tierra desde el que explorar el universo.
DEP. https://t.co/w5z5uzESP5
"Convirtió los cielos de Canarias en un balcón único para descubrir estrellas. Nos deja en herencia los cielos de esas islas que tanto amó: el mejor lugar de la Tierra desde el que explorar el Universo", publicó el presidente.
Padre de la astrofísica moderna
Francisco Sánchez, considerado el padre de la astrofísica moderna en España, falleció a los 89 años dejando un legado que cambió para siempre la relación de Canarias con la ciencia y el conocimiento.
Nacido en Toledo en 1936, llegó a Tenerife en 1961 para estudiar la calidad astronómica del cielo canario. Convencido de su potencial, en 1964 logró que la Universidad de Burdeos instalara el primer telescopio profesional en el Observatorio del Teide. Con aquel acuerdo, sentó las bases de los convenios internacionales que, décadas más tarde, convertirían a Canarias en uno de los principales referentes mundiales en observación astronómica.
Primer catedrático de Astrofísica
Sánchez fundó el primer grupo de investigación astrofísica de España, impulsó las primeras tesis doctorales en la materia y en 1969 defendió la primera tesis doctoral en Astrofísica leída en el país. Cinco años después, en 1974, se convirtió en el primer catedrático de Astrofísica de una universidad española, en la Universidad de La Laguna (ULL).
Su empeño llevó en 1973 a la creación del Instituto Universitario de Astrofísica de la ULL, germen del actual IAC. Bajo su impulso también nació el Observatorio del Roque de los Muchachos en La Palma, cuyas obras comenzaron a finales de los años 70 y lo consolidaron como uno de los enclaves más importantes para la observación del cielo a nivel mundial.