El consejero de Educación, Formación Profesional, Actividad Física y Deportes del Gobierno de Canarias, Poli Suárez, ha admitido este miércoles que hay que ser realistas y es "complicado" alcanzar el 5% del PIB de inversión para el sistema educativo, tal y como marca la ley autonómica educativa, y que faltan 600 millones para ello.
Suárez, que ha comparecido en comisión parlamentaria para informar del proyecto de ley de presupuestos autonómicos para 2026 en lo relativo a su departamento, ha hecho esta reflexión tras ser criticado por la oposición por no cumplir con la ley que establece que, a partir del año 2022, se debería destinar como mínimo el 5% del PIB al sistema educativo, en vez del 4,40% previsto para el próximo año.
Años de pandemia
Según el PSOE, durante su presidencia del Gobierno de Canarias se alcanzó el 4,67% del PIB, momento en el que había una pandemia, ha recordado el consejero, lo que hizo que el PIB cayera en un 20% y, por ello, la inversión educativa mostrara un porcentaje superior.
“Si en estos momentos se diese el mismo contexto que en el año 2021 la inversión en educación alcanzaría el 5,5% del PIB”, ha detallado Suárez, quien ha reconocido que le gustaría llegar a este porcentaje, aunque para ello faltan 600 millones de euros en un año, cuando el PSOE en cuatro años lo aumentó en 425 millones.
A este respecto, el diputado de CC Jonathan Martín ha agregado que conseguir 600 millones más para educación solo se podría lograr incrementando impuestos o quitándole dinero a otras áreas sociales, como sanidad o bienestar social.
Gratuidad de libros y materiales
El presupuesto de Educacion que ha presentado el Gobierno de Canarias asciende a 2.315 millones de euros, lo que supone un incremento del 7,4% respecto al ejercicio anterior. Con 159 millones más que en 2025, se trata del mayor presupuesto educativo de la historia de las islas, según anunció Suárez.
El nuevo presupuesto permitirá poner en marcha uno de los proyectos más esperados del sistema educativo canario: la gratuidad de los libros y materiales escolares, que se implantará progresivamente a partir del curso 2026-27 en todas las etapas de las enseñanzas obligatorias.
