Los psicólogos clínicos llevan años denunciando la falta de plazas para formar especialistas en Canarias, lo conocido como PIR. Este déficit ha conducido a “contrataciones ilegales” de profesionales sin la titulación requerida.
Desde la Sociedad Española de Psicología Clínica (SEPC-ANPIR), han alertado de que el Servicio Canario de la Salud ha iniciado la contratación de 10 psicólogos sin la especialidad en la red de Salud Mental Infanto-Juvenil de Gran Canaria, que atiende a niños y adolescentes de toda la provincia de Las Palmas.
“No es que de repente falten psicólogos clínicos. Es que la Administración sabe desde hace años que no está formando suficientes porque solo hay seis plazas PIR para todo el Archipiélago”, explica una psicóloga clínica asociada a la ANPIR.
Qué es el PIR y cuántas plazas hay en Canarias
Para trabajar como psicólogo en el Sistema Nacional de Salud es obligatorio tener el título de Especialista en Psicología Clínica, que solo se obtiene a través del PIR, un programa de formación sanitaria especializada similar al MIR de los médicos.
Tras aprobar un examen estatal, los profesionales se forman durante cuatro años, con salario, supervisión y rotaciones por distintos servicios de salud mental. Es, según ANPIR, la única garantía de calidad y seguridad para los pacientes. “No es una cuestión de opinión ni de corporativismo: lo dice la ley”, subrayan.
En Canarias, el problema se agrava por un dato clave: solo se ofertan seis plazas PIR al año en toda la comunidad autónoma, “un número ridículo si lo comparamos con las necesidades reales”, señala la fuente consultada.

Contrtación de profesionales sin especialiad
Y las consecuencias de este panorama se están reflejando en la actualidad en el ámbito infanto-juvenil, donde se atiende a menores con trastornos graves, desde problemas del neurodesarrollo, conductas suicidas, trastornos alimentarios hasta cuadros psicóticos.
Según el colectivo profesional, psicólogos sin la especialidad están trabajando en recursos clave como el Hospital Materno Infantil o el Hospital de Día Infanto-Juvenil de Gran Canaria, centros de referencia para toda la provincia. A lo que se suma las contrataciones que están llevando a cabo desde el SCS.
Efectos en la atención del paciente
“La contratación de profesionales no especializados al final es un parche”, asegura la psicóloga entrevistada. Según indica, “la administración no se preocupa en formar ni cuidar a los profesionales con los títulos de especialistas, sino que busca los recursos más baratos y accesibles”.
Y “con ello lo único que consiguen es reducir la calidad asistencial que se ofrece a las personas con problemas de salud mental y vulnerar la ley”, afirma.
En este sentido, los psicólogos clínicos lo extrapolan a otras especialidades sanitarias para explicar la gravedad: “A nadie se le ocurriría poner a un médico general para cubrir un cardiólogo u oncólogo. Con la salud mental sí se hace, y eso dice mucho”.
Setencias en otras comunidades
ANPIR recuerda que esta situación no es exclusiva de Canarias. A nivel nacional ya existen sentencias judiciales que han dado la razón al colectivo profesional en otras comunidades.
Es el caso de Navarra, donde los tribunales condenaron al Gobierno autonómico por contratar psicólogos sin la especialidad exigida, y también Baleares ha vivido situaciones similares. “Se trata de contrataciones ilegales, no lo decimos nosotros, lo dice la propia ley”, reiteran los profesionales clínicos.

Fuga de especialistas
A la falta de formación y, por tanto, de profesionales titulados, se suma el escaso cuidado a los que ya se encuentran en el sistema. La fuente consultada expone que se está produciendo una “fuga de especialistas importante” debido a las condiciones laborales en el servicio.
Según cuenta, en los últimos meses, una decena de psicólogos clínicos, así como psiquiatras, han abandonado los servicios de salud mental infanto-juvenil en las Islas y han migrado a otros servicios al no ver mejoras.
Reclamaciones de los profesionales
Toda estas situaciones que atraviesan a la profesión ha conducido a la movilización del sector. El pasado 26 de septiembre, 145 profesionales presentaron una reclamación colectiva ante el Servicio Canario de la Salud. No obstante, desde ANPIR, aún no han recibido respuesta.
“La Administración actúa de manera unilateral sin contar con nosotros. Reclamamos que se nos escuche, que se aumenten de manera efectiva las plazas de formación sanitaria especializada, que respeten la ley y de paso que cuiden un poquito más a sus profesionales”, apunta la fuente consultada de la Sociedad.
Según los expertos, el Gobierno “debería haber previsto esto hace tiempo” para así solventarlo a largo plazo. “Estamos con el boom de la salud mental desde el 2020, con la pandemia, y resulta que no hay coherencia entre la detección del problema de falta de especialistas y las soluciones que ofrecen para subsanarlo, y así deje de repetirse”, concluyen.