El rector de la Universidad de La Laguna (ULL), Francisco García, ha cargado contra el supuesto estudio que sitúa a la institución académica como la peor valorada por los estudiantes españoles. El rector ha dudado de la credibilidad del estudio y ha reivindicado que otro estudio más fiable asegura que el 68% de los estudiantes graduados volverían a elegir cursar sus estudios en esta universidad. 

Las palabras de García surgen después de que este fin de semana se haya publicado una información que asegura que la ULL es la institución académica peor valorada por sus estudiantes. García ha señalado que es un estudio elaborado por propios estudiantes que “no tiene ni ficha técnica” ni muestreo estratificado y que “por tanto es un estudio que desde el punto de vista técnico no tiene relevancia”. 

Confundir a la población

El rector ha señalado que los últimos datos del barómetro del Consejo Social aseguran que el 68% de los estudiantes “repetirían” hacer sus estudios en esta institución académica. “Estos son los datos de un estudio técnico con una muestra de casi 800 alumnos de la Universidad de La Laguna estratificado por centros, por estudios”, contrapone con la macroencuesta universitaria de Lab4Future y Wuolah. 

“Estamos en un momento en el que corremos el riesgo de difundir fake news (noticias faltas) y confundir a la opinión pública”, ha avisado el rector. Asimismo, García ha apuntado que él alerta de este tipo de informaciones “porque creo que corremos el riesgo de dar información tergiversada”. “Creo que hay que ser cuidadoso a la hora de difundir información y ser riguroso a la hora de usar informaciones y trasladarla a la opinión pública”, ha valorado el rector. 

Dudoso ranking

Para García “resulta curioso que en ese estudio de las cinco universidades que salen mejor, tres son universidades prácticamente desconocidas”. Asimismo, ha relacionado esta situación con el proceso de regulación del conjunto de entidades que pueden llamarse universidades para el que se van a establecer unos nuevos criterios más restrictivos. 

Es una medida que aplauden desde la universidad pública, que ya había alertado del peligro de la proliferación de empresas privadas que se ofertan como universidades en las islas. “El que se regulen los criterios para que proyectos legítimos empresariales puedan ser considerados universidades me parece básico para transmitir claridad a los operadores y los usuarios”, ha apuntado García.