San Juan de la Rambla prepara Los Santitos, el Halloween más tradicional

El municipio del norte de Tenerife el 1 de noviembre su particular fiesta en honor al día de Todos los Santos bajo el nombre Los Santitos

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Unos niños se acercan a una vecina con cestas de mimbre en la celebración de Los Santitos. / Cedida
Unos niños se acercan a una vecina con cestas de mimbre en la celebración de Los Santitos. / Cedida

Gloria Méndez, edil encargada de la gestión del Patrimonio Cultural de la Villa de San Juan de la Rambla, ha anunciado que este año se retoma con normalidad, dentro del contexto sanitario actual, una de las tradiciones más antiguas del municipio: “Los Santitos”. Costumbre ramblera que hace que en la mañana de Todos los Santos, las calles del Casco se llenen de menores cargando cestas de mimbre decoradas por ellos mismos donde almacenan los agasajos que reciben puerta por puerta, pues cada vecino procura tenerlos preparados el día antes. En el pasado eran frutas de temporada, frutos secos o alguna moneda, en la actualidad prevalecen las chucherías. Esta tradición sobrevive año tras año y se transmite de generación en generación.

Esta tradición festiva emula a la popular Halloween americana, que se celebra la noche anterior y que ya tiene un recorrido internacional. De la nocturnidad del 31 de octubre típìca de la celebración mudial se pasa a la claridad de la mañana del 1 de noviembre en las calles de San Juan de la Rambla. Además, de la inseparable temática de terror en Halloween, la fiesta local se percibe en tonos de alegría y feloicidad. Por último, los carismáticos disfraces de fantasmas, zombies y demás ropajes clásicos de Halloween, lse quedan guardados y los rambleros disfrutan la jornada con el traje típico del municipio.

Pan por Dios

En paralelo, el Consistorio trabaja en recuperar el “Pan por Dios”, tradición de estilo similar a la primera en la que en este caso las familias más desfavorecidas de la parte alta recorrían en época de posguerra las casas solicitando algún agasajo que solía consistir en pan, vegetales, frutas o productos de la cosecha. En la actualidad ha evolucionado al hecho de que las panaderías, tal día como el 1 de noviembre, regalan entre sus clientes habituales un pan de leche en homenaje a aquella época. Para dar a conocer lo que se hacía y en aras de que no se pierda la costumbre, los centros educativos de primaria trabajan con sus alumnos dando a conocer la tradición. En lo que respecta a la Escuela Infantil “Trompita”, el centro reparte entre el alumnado un pan de leche donado por la Panadería La Vera.

“Por suerte, la mejora de la situación sanitaria nos permite desarrollar nuestras tradiciones y devolver la ilusión a los más pequeños, que esperan con ansias vivir Los Santitos como antes de la pandemia. No obstante, desde el Consistorio recordamos la importancia de seguir respetando las normas para prevenir los contagios. Esto es, la obligatoriedad de usar mascarilla, mantener la distancia de seguridad y usar gel hidroalcóholico”, explica el alcalde Ezequiel Domínguez. “Nuestros ciudadanos se  definen por un comportamiento ejemplar durante estos últimos años, por lo que confiamos en que esta tradición se realice sin ningún contratiempo”.