“Si te llaman para un contrato y estás en la ducha o cuidando a tu hijo y no coges la llamada, inmediatamente tienes una penalización". Este el calvario que aseguran sufrir sanitarios de Canarias ante la norma que regula el sistema de contratación temporal del Servicio Canario de la Salud (SCS).
Enfermeras, matronas y fisioterapeutas están obligados, según manifiestan, a “estar permanentemente pendientes del teléfono” para no ser penalizados, una situación que llevan denunciando desde hace años.
Desde el Sindicato de Enfermería SATSE Canarias explicaban que esa amonestación se podía llegar a recibir incluso "por motivos justificados como descansar de una guardia o asuntos personales". Al parecer, si no se contesta la llamada, el trabajador pasará automáticamente a un estado llamado “no disponible”.
“Es inadmisible”
Alejandro Gordillo, portavoz del sindicato SATSE Canarias, explica a Atlántico Hoy que se trata de una norma del año 2011 que afecta a enfermería y a otras categorías que tienen publicadas las listas oficiales que emanan de la última OPE de 2019, ya que dicha norma está vinculada a las oposiciones. Señala que, cuando esta norma fue negociada en la Mesa Sectorial de 2011, "salió adelante sin el acuerdo de los sindicatos, siendo impuesta de manera unilateral por la administración de aquel entonces". Desde llevan "años solicitando su eliminación" al considerarla perjudicial tanto para los trabajadores como para la propia administración "que pierde personal por las sanciones excesivas derivadas de esta normativa".
Gordillo añade que, con la nueva dirección del Servicio Canario de Salud, "se adquirió el compromiso de modificar esta normativa de contratación una vez finalizado el proceso de estabilización", aunque este se retrasó. "En la última ley de presupuestos se dio un primer paso al desvincular la normativa de contratación, requisito previo para poder cambiarla. Sin embargo, la presión de algunos trabajadores con buenos puestos en la lista de 2019 y de ciertos sindicatos provocó que se publicara la lista de empleo, lo que obligó a aplicar nuevamente la orden de 2011", explica. Esta normativa obliga a los profesionales a estar pendientes del teléfono, ya que si no responden de inmediato a una llamada de contratación —por estar conduciendo, atendiendo a un paciente o realizando cualquier otra tarea— sufren una penalización de 15 días hábiles sin poder trabajar ni percibir salario.
Sistema
Gordillo apunta que desde el Servicio Canario de Salud se remitió un borrador que comenzó a negociarse en el año 2018, con el cual "tampoco estamos de acuerdo". Actualmente, cuenta, están trabajando en una nueva normativa que recoja mejoras. SATSE ha reclamado que se abra un proceso de negociación en la Mesa Sectorial de Sanidad para sustituir la normativa vigente y diseñar un modelo “más justo y garantista”. Entre sus propuestas figura la creación de un grupo de trabajo específico sobre listas de empleo y la implantación de un sistema de llamamientos alternativo que elimine esa penalización por no responder al teléfono.