Imagen de las manifestaciones de Canarias tiene un límite / EFE - QUIQUE CURBELO
Imagen de las manifestaciones de Canarias tiene un límite / EFE - QUIQUE CURBELO

Turistas cargan contra las protestas por masificación en Canarias: "Me llevaré mis 5.000 libras"

Las críticas se basaban en la falsa idea de que las manifestaciones eran contra los turistas, un discurso malinterpretado por parte de los medios de comunicación británicos

Irene Cartaya

Actualizada:

A veces, el malentendido —o las ganas de malentender— viaja más rápido que el turista. Basta un titular sacado de contexto o una palabra mal traducida para que la imagen de un lugar cambie en cuestión de horas. Eso es lo que está ocurriendo con Canarias, que se ha visto envuelta en un debate internacional sobre el turismo, la sostenibilidad y el respeto a quien habita el destino.

Mientras en las islas se llenan las calles de pancartas que claman por un modelo equilibrado, algunos foros de viajeros británicos hierven con mensajes de indignación, amenazas de cancelación y malinterpretaciones peligrosas.

"No quieren turistas"

La creadora de contenido @anapologyx decidió investigar qué opinaban los visitantes extranjeros sobre las protestas que han tenido lugar en las islas. Lo hizo infiltrándose en un grupo británico de turistas, y lo que encontró fue un hervidero de comentarios que, más allá del debate, parecían responder a un claro malentendido.

“Me llevaré mis 5.000 libras a otro sitio”, decía uno de los mensajes. Otro advertía: “Iba a reservar para Tenerife, pero vamos a ver cuánto tardan en rogar que volvamos”. Las críticas se basaban en la falsa idea de que las manifestaciones eran contra los turistas, un discurso alimentado por titulares sensacionalistas en algunos medios británicos que etiquetaban el movimiento como "anti-tourist".

@anapologyx ¿Qué opinan los guiris de las manifestaciones de Canarias? (esperen al final) #🇮🇨 #canarias #canariastieneunlimite #turismo #parati ♬ Yacht Club - MusicBox

Qué piden los canarios

Pero lo cierto es que las protestas no van dirigidas contra quienes visitan el archipiélago, sino contra un modelo turístico que, según denuncian muchos isleños, ya no es sostenible. Bajo el lema "Canarias tiene un límite", miles de personas han salido a la calle para pedir una revisión profunda de las políticas que regulan el sector.

Entre las principales demandas están el control de la vivienda vacacional, que ha disparado los precios del alquiler para residentes, la protección del medioambiente, especialmente en zonas naturales saturadas, y un reparto más justo de los beneficios del turismo, que actualmente se concentran en grandes cadenas.

Modelo al borde del colapso

En zonas como Tenerife o Lanzarote, la presión turística ha llegado a niveles que los expertos ya consideran preocupantes. Las cifras de ocupación, la sobreexplotación de recursos como el agua o la falta de regulación de la vivienda turística están deteriorando la calidad de vida de los canarios y la propia experiencia del visitante.

Por eso, lo que piden muchos canarios no es que dejen de venir turistas, sino que se garantice un equilibrio. Que el modelo deje de ser intensivo y empiece a ser inteligente. Frente a este contexto, el malestar de algunos visitantes en redes sociales parece ignorar una realidad mucho más compleja. Canarias no odia a los turistas. Pero sí cuestiona un sistema que, en nombre del turismo, puede estar dejando atrás a quienes lo hacen posible.