El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, asistió este martes a la apertura del nuevo enlace de Las Chafiras, en el sur de Tenerife. Esta infraestructura, parte del proyecto del tercer carril de la TF-1, ha supuesto una inversión de casi 22 millones de euros y busca mejorar la conectividad en uno de los tramos con mayor tráfico de Canarias.
Clavijo aseguró que se trata de un “hito en la historia de la obra”, al permitir una incorporación más ágil desde la carretera general a la autopista, especialmente entre San Isidro y Las Américas.
Mejorar la movilidad
El presidente estuvo acompañado por el consejero de Obras Públicas, Pablo Rodríguez, la presidenta del Cabildo tinerfeño, Rosa Dácila y representantes de los ayuntamientos de San Miguel y Granadilla de Abona.
Rodríguez destacó que con la apertura de todo el enlace se completa la glorieta elevada, hasta ahora utilizada parcialmente como puente, resolviendo así los principales cuellos de botella de la zona.
Acelerar accesos clave
La infraestructura facilita los accesos desde Los Abrigos y San Miguel hacia la TF-1, y viceversa, eliminando puntos críticos de congestión. Se espera que las últimas actuaciones, como el asfaltado y la conclusión del ramal hacia Santa Cruz, finalicen antes de que acabe el año.
El objetivo, según Clavijo, es garantizar que las obras afecten lo menos posible al día a día de la ciudadanía y contribuyan a una movilidad segura y eficiente para residentes y turistas.
Glorieta elevada
La nueva glorieta, construida entre los puntos kilométricos 62+040 y 64+540, se alza sobre la TF-1 mediante dos pasos superiores circulares. Conecta con la TF-65, los ramales hacia Santa Cruz y las nuevas vías colectoras en sentido sur.
Además, se han adaptado carreteras cercanas como la TF-652 y TF-655, mejorado las paradas de guaguas, y creado accesos peatonales inclusivos. El proyecto incluye cuatro nuevos ramales, eliminando los anteriores para optimizar la fluidez del tráfico.