En Canarias existe un espacio que destaca por sus dimensiones y por la variedad de servicios termales que ofrece: el Aqua Club Termal, situado en el sur de Tenerife. Con más de 6.000 metros cuadrados, está considerado el balneario urbano más grande del Archipiélago y uno de los más amplios del continente europeo dentro de su categoría.
Ubicado en Costa Adeje, una de las zonas turísticas más consolidadas de la isla, este centro reúne diferentes instalaciones orientadas al uso terapéutico del agua y al bienestar físico. Su elemento más conocido es un circuito termal que integra hasta 18 áreas diferenciadas, diseñadas para trabajar aspectos relacionados con la relajación, la estimulación muscular o la mejora de la circulación.
Múltiples espacios
Entre los espacios que componen el circuito se encuentran:
- Piscinas de hidromasaje y tonificación
- Flotarium con agua de alta salinidad
- Sauna
- Baño turco
- Terma romana
- Duchas de contraste y templo de duchas
- Pediluvio
- Zonas de descanso y relajación
Estos elementos combinan usos tradicionales de balneario con recursos propios de los centros modernos de hidroterapia.
Bienestar físico
Aunque el acceso está abierto al público general, las instalaciones se han planteado para cubrir un abanico amplio de necesidades. Según sus responsables, el circuito termal se utiliza habitualmente para:
- Favorecer la circulación venosa y linfática
- Reducir tensiones musculares
- Aliviar molestias articulares
- Contribuir al manejo del estrés y la ansiedad
- Facilitar la descompresión física en personas con rutinas intensas
Este tipo de espacios se apoyan en la temperatura del agua, la flotabilidad, los chorros a presión y los cambios térmicos, métodos habituales en centros termales de carácter terapéutico.