Canarias se ha ido consolidando en el mapa cinematográfico mundial. En los últimos años, grandes producciones como Furia de Titanes o A todo gas han escogido las islas como plató. Pero, mucho antes de que el archipiélago se convirtiera en un destino de moda para grabaciones, ya había aprecido —fugazmente— en algunas de las ficciones más vistas del mundo.
Es normal no recordarlo, pero en una de las series más aclamadas de todos los tiempos, Tenerife es mencionada de forma directa y con un transfondo tan real como trágico.
La escena en Breaking Bad
El 21 de marzo de 2010, se emitía el primer capítulo de la tercera temporada de Breaking Bad, una serie que marcaría un antes y un después en la televisión. En una escena concreta, Walter White —el ya complejo antihéroe que encarna Bryan Cranston— habla a sus alumnos sobre las consecuencias del caos.
Para ilustrarlo, hace referencia a un suceso ocurrido en Tenerife en 1977, cuando dos aviones colisionaron en la pista del aeropuerto de Los Rodeos. Un accidente que, con 583 fallecidos, sigue siendo el peor siniestro de la aviación comercial hasta la fecha. La mención es breve, pero impactante. Y coloca a Canarias en el centro de una historia global que va mucho más allá de la ficción.
Canarias en la cultura pop
La aparición de Tenerife en Breaking Bad no es un caso aislado. La isla también fue nombrada en la temporada final de Perdidos y en un episodio de Los Simpson, donde Homer y Bart liberan a un canario animándole a "volver a las Islas Canarias".
Estos guiños, aunque pequeños, reflejan cómo el nombre del Archipiélago ha ido filtrándose en el imaginario cultural internacional, a veces por su belleza, otras por su historia. Y también, como en este caso, por ser el escenario de una tragedia que marcó un hito en la aviación.
