La Agencia de Protección del Medio Natural del Gobierno de Canarias ha impuesto dos multas de 200 euros cada una al Consejo Insular del Agua por los vertidos en Playa Jardín, una de las principales calas de Puerto de la Cruz, en Tenerife, que lleva casi un año cerrada o con reccomendaciones de no bañarse por el mal estado de sus aguas.
El Consejo Insular del Agua, que depende del Cabildo de Tenerife, ha recurrido ambas sanciones al considerar que están mal fundamentadas. También entienden que no han incumplido uno de los diez condicionantes impuestos respecto a la calidad del agua, según adelanta Tenerife Ahora.
Abierta en junio
Puerto de la Cruz anunció la reapertura de Playa Jardín a mediados del pasado mes de junio, tras casi un año cerrada, gracias a un esfuerzo conjunto entre las administraciones, según dijo el alcalde, Leopoldo Afonso (PP).
La reapertura se produjo después de una limpieza íntegra de todos los elementos como arquetas y colectores de Punta Brava, cuya rotura del emisario ha causado diferentes periodos de contaminación en lo que va de año.
Nuevo emisario
La depuración terciaria en la EDAR del Valle de La Orotava y Punta Brava, impulsada por Cabildo y Gobierno de Canarias, también ha sido clave en todo este proceso. Desde diciembre de 2024, los análisis de Salud Pública muestran resultados dentro de los valores legales, certificando la calidad del agua y el cumplimiento de las condiciones para la reapertura.
Asimismo se ha puesto en marcha la sustitución del emisario submarino de Punta Brava, cuya fisura era principal fuente de vertidos, luego licitado tras quedar desierta inicialmente. Esta infraestructura debería comenzar su ejecución en mayo, con un plazo estimado de 16 meses.