Después de una “injusta” multa hace ya dos años, cuya cuantía ha ido ascendiendo hasta los 5.000 euros y por la que llevan meses esperando la decisión de Capitanía Marítima sobre sí deben abonarlos o no; después de la reciente prohibición de hacer una limpieza submarina por falta de una embarcación de apoyo; ahora, la ausencia en los presupuestos del Cabildo de Tenerife para 2024 de ayudas económicas a las asociaciones medioambientales, que se habían acordado con anterioridad, ha terminado de sacar la rabia que lleva dentro Conrado Cabeza, presidente de Promemar.
“Yo había firmado un documento en el que todos los partidos estaban de acuerdo en lo de la subvención para este tipo de actividades y cuando se presentaron los presupuestos no entramos las asociaciones medioambientales como la nuestra”, explica a Atlántico Hoy Conrado.
Política
En este contexto, el representante de Promemar añade que estas son las cosas que pasan con “la pelea entre políticos”. Aun así, está convencido de que van a salir para adelante con esto como sea y ha iniciado esta semana una recogida de firmas para que les den soluciones, “tanto el tema de la multa, como la autorización explícita de la embarcación y que nos den la dichosa subvención para poder afrontar los gastos”.
Así, ejemplifica que, si la plataforma sin ánimo de lucro tiene que buscar una embarcación para limpiar los fondos marinos, “la tendré que pagar digo yo”.
Pasar a la acción
En este sentido, con una clara determinación, Conrado Cabeza afirma que van a hacer “todo lo que haga falta” y si se tiene que encadenar en Presidencia del Gobierno, se encadena. “Ya estoy harto no, lo siguiente”, expresa el presidente de Promemar.
Para comenzar la recogida de firmas a través de la popular changes.org, Conrado Cabeza también ha compartido un vídeo enumerando las causas que le han llevado a tomar esta decisión ante la inacción política y los constantes obstáculos que tiene que sortear para seguir limpiando los litorales de Tenerife, finalizando con un claro mensaje.
“Que los políticos se pongan las pilas y cumplan con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Si hace falta encadenarse, me encadenaré donde haga falta y ya buscaré el tiempo en mi trabajo para poderlo hacerlo, porque estamos hartos y cansados de lo que nos está ocurriendo con la limpieza submarina. Ya es hora de pasar a la acción”.
Las ayudas abortadas
El anterior gobierno del Cabildo de Tenerife aprobó en abril una moción, renegociada durante un pleno de la institución insular, reconociendo al voluntariado ambiental de limpieza de playas y fondos marinos.
Esa moción, a iniciativa del PSOE, pero bajo el lápiz de Conrado Cabeza, marcó un hito en el sector de la protección de las costas, “en la retirada de residuos y en conseguir este documento, además de una subvención para las actividades”, valoró entonces el presidente de Promemar.
El problema de la embarcación
Recientemente, Promemar retiró 183 kilos de basura de La Listada (Arico) donde “los neumáticos fueron los protagonistas”, según especificaron en las redes sociales.
Sin embargo, y a pesar de la labor social altruista de la plataforma, los trabajos de limpieza programados se quedaron a la mitad, pues solo pudieron ejecutar su labor sobre el terreno y no bajo la superficie marina, porque Capitanía Marítima se las prohibió por no tener una embarcación de apoyo.
“Es una cosa que no entendemos”, expresó entonces el propio Conrado. En este sentido, el alma mater de Promemar se quejó del agravio comparativo con los clubs de buceo. “No se las piden. Nos la piden a nosotros para sacar neumáticos”.
Pendientes de la multa de 5.000 euros
Al margen de este encontronazo con Capitanía, Promemar mantiene otra circunstancia abierta con esta institución, pues están pendiente de la “injusta” multa que la Guardia Civil les puso hace ya dos años por unos trabajos de limpieza submarina en Tabaiba y que, tras diversos recursos de la plataforma, acabó ascendiendo hasta los 5.000 euros.
Una situación que dejó con la soga al cuello a la asociación, por la tuvieron que realizar una recogida de fondos para poder salvar a la organización.
Sin embargo, una prórroga lograda en abril de 2023, precisamente emitida por Capitanía Marítima, ha extendido el tiempo de espera hasta la actualidad, dejando la incertidumbre en el día a día para saber si deben ejecutar, o no, el pago de la multa.