Promemar crea un plan de seguridad para limpiar el litoral ante el silencio de las instituciones

El presidente de la plataforma, Conrado Cabeza, critica la apatía de las administraciones para facilitarles las limpiezas submarinas con una ley mientras sigue esperando la resolución de la multa de 5.000 euros

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Conrado Cabeza, presidente de Promemar, junto a un globo de recogida y basura del fondo marino ya en tierra. / Promemar
Conrado Cabeza, presidente de Promemar, junto a un globo de recogida y basura del fondo marino ya en tierra. / Promemar

La Asociación de Proyectos Medioambientales Marinos Promemar sigue ejecutando sus limpiezas costeras a la vez que se han hartado de la inmovilidad de las administraciones para confeccionar un marco de actuación de estas limpiezas que regularice la actividad y que, de esta manera, el colectivo pueda recuperar su formato más eficiente de recogida de basura sin arriesgarse a ser sancionados.

En este sentido, su fundador y presidente, Conrado Cabeza, ha anunciado que van a crear un plan de seguridad que sirva de guía para no encontrarse con obstáculos inesperados bajo la actual normativa al respecto de las limpiezas en el litoral. “Ya que las instituciones no se hacen cargo de lo que está pasando con la limpieza submarina, nosotros lo vamos a poner dentro de nuestro plan de seguridad”, apunta en declaraciones concedidas a Atlántico Hoy.

El plan de seguridad

“Especificaremos tanto lo que realizamos y cómo queremos ejecutar las limpiezas, que son con la utilización del saco y el globo”, dos herramientas imprescindibles para acelerar la limpieza de los fondos marinos de manera exponencial. “Todo para que, a la hora de presentar las solicitudes, dentro de nuestro plan de seguridad, tengamos una actuación para ver si las instituciones son capaces de darnos una autorización para poder realizar las actividades, como estábamos haciendo al principio, antes de que nos multaran”, abunda ejemplificando una sanción que recibieron en 2021 tras limpiar los fondos de Tabaiba al no haber pedido una autorización pertinente para utilizar esas herramientas imprescindibles.

En este contexto, Conrado pide que de una vez por todas las administraciones se puedan sentar con ellos para establecer un anteproyecto que le permita realizar su labor altruista de limpiar las costas de Tenerife.

“Ya hemos hablado con asociaciones vecinales para hacer fuerza para que nos reciban, por lo menos en el cabildo, y así redactar un anteproyecto o que en las leyes existentes se nos adapte una para nosotros para poder realizar la limpieza, porque estamos otra vez con el mismo rollo”, argumenta recordando que hace un año ya habían conseguido dar ese paso en la Corporación insular y que se ha quedado en agua de borrajas. “Se trata de que las limpiezas marinas estén ya reguladas. Como ellos quieran, pero que tengamos un documento, que es lo importante”, agrega el presidente de Promemar.

Herramientas necesarias

Mientras la asociación sigue con las limpiezas, teniendo que pedir las autorizaciones de forma individual -tienen planificadas 14 este año y tardaron hasta seis horas en conseguirlas-, el problema sigue estando específicamente bajo del agua. “La tenemos que hacer con nuestras propias manos. Necesitamos el saco y el globo. Que no vamos a sacar un barco de 10 metros y vayamos a poner en peligro la vida de los buzos. Estamos intentando utilizar el saco y el globo para sacar las latas, los neumáticos, bicicletas… Son cosas más livianas de uno 20 o 30 kilos”, esgrime Cabeza.

Con todo, Promemar desconoce quién es el responsable de que puedan ejecutar las limpiezas submarinas. “Capitanía dice que no son los responsables de firmar nada y el Gobierno de Canarias dice que no son responsables de hacer nada. Lo que queremos saber es quién es el responsable”, se queja. “Ya que nadie quiere hacerlo por ley, nosotros queremos incluirlo en nuestro plan de seguridad”, añade.

La espera interminable de la multa

Este año ya se cumplen tres desde que Promemar recibió una inesperada multa mientras ejercían su labor en los fondos marinos de Tabaiba. La Guardia Civil les sancionó con el argumento de que carecían de la autorización pertinente y, tras los recursos, la multa acabó ascendiendo hasta los 5.000 euros, poniendo en jaque la viabilidad del proyecto.

Tanto, que Conrado hizo promovió una recogida de fondo para sumar la cantidad. Sin embargo, la decisión final sobre la sanción aguarda en Capitanía desde hace casi un año, dejando la incertidumbre sobre Promemar. “La decisión siempre ha estado en Capitanía. Son los que sancionan y los que tienen que decirnos algo, pero están dejando pasar los plazos y ya llevamos casi tres años desde la multa”, relata Conrado Cabeza.

Así, señala que se trata de que les contesten “para saber qué hacer, no por el tema de pagarla, porque el dinero se buscará o lo que sea, se trata de que las limpiezas submarinas tienen que estar registradas y haber un protocolo y una normativa”.

Huelga de hambre

Ante la inacción para con la asociación de las instituciones públicas, Conrado Cabeza sigue firme en su pretensión de encadenarse frente a Presidencia de Gobierno o de iniciar una huelga de hambre, porque la hartura le está poniendo al límite viendo cómo pasan los años y nadie mueve un dedo.

Si no me buscan una solución que es una ley y la utilización de herramientas me siento, me encadeno y sea lo que Dios quiera. Necesitamos sentarnos con alguien y contarles lo que está pasando. Necesitamos a alguien que nos escuche”, finaliza.

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