“¿Hasta dónde es razonable que haya rodajes en el Teide?”. Esta pregunta la ha lanzado al aire este miércoles la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, para explicar uno de los asuntos que retrasan el Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del Teide. Desde el 1 de enero la institución ha asumido las competencias del parque nacional y pondrá una tasa para poder acceder a él, pero las actividades que se deben permitir todavía están en discusión.
La Consejería de Transición Ecológica remitió al cabildo el documento del PRUG con sus matizaciones sobre noviembre de 2024. Desde entonces, según aseguró el consejero Mariano Zapata, no se había convocado ninguna reunión desde el cabildo para seguir la tramitación del documento.
Dávila ha asegurado este miércoles que recientemente, "esta semana o la anterior", se produjo una reunión para abordar el documento. Lo que está retrasando su aprobación, según ha anunciado, son las actividades que se podrán o no permitir en el parque nacional.
Permitir los rodajes
El texto que ha remitido la consejería, en realidad, surge de uno previo acordado por el anterior gobierno insular, en manos del socialista Pedro Martín. En ese documento se prohibía “taxativamente” el rodaje, tanto de publicidad como de películas en el parque nacional que no fuera destinado “única y exclusivamente” para la promoción del parque por razones científicas.
Dávila ha apuntado que tanto el Cabildo insular actual, en manos de Coalición Canaria y Partido Popular, como el Gobierno de Canarias estaban en contra de esa prohibición. “Hay que darle una nueva redacción y establecer hasta dónde es razonable que haya rodajes de cine o de publicidad”, ha explicado la presidenta.
Dentro de ese debate estaría el hecho de si habría que pagar una tasa por ese rodaje o el tipo de autorización que deberían tener las productoras. Pero también si se debería permitir que puedan haber colmenas.
Un texto en negociación
Dávila ha asegurado que se han estado negociando diferentes puntos del texto anterior con los que no están de acuerdo. En este sentido ha asegurado que ya está “el texto final” con esas modificaciones que tienen que ser “consensuadas”. A partir de ahí se llevará al Patronato Nacional del Teide y con su acuerdo se elevará al Consejo de Gobierno para su aprobación. Además, según ha apuntado Dávila también se debe aprobar un decreto para los bienes materiales y humanos.
El pleno del Cabildo de Tenerife había acordado que a partir del 1 de enero se implantaría una tasa para hacer uso de los parques naturales de la isla. De momento este acuerdo solo se aplica en el Barranco de Masca.
Dávila ha asegurado que se está estudiando cada espacio natural para poderlo “modular de acuerdo con los usos y la experiencia que tiene el visitante”. Por un lado se tiene que establecer un cupo de visitantes y por otro el precio que se debe cobrar.